Una serie de acontecimiento que se iniciaron con la presentación de un interno que logró burlar los controles y llegó con un arma blanca a la sala donde se lo juzgaría, seguida por el robo de una camioneta de la playa de estacionamiento de la cárcel de Bouwer y, posteriormente, la muerte de una interna durante el viernes pasado por la noche, a lo que se sucedieron rumores de intentos de motín, pusieron en evidencia graves falencias de seguridad dentro del Servicio Penitenciario de Córdoba (SPC).
Ayer por la mañana, la familia de Rosel Janet López, la mujer que encontraron ahorcada en su celda, presentó una denuncia penal contra Juan Bouvier, titular del SPC. Carlos López, padre de la interna que perdió la vida, descreyó de la versión oficial que indica que su hija se suicidó y explicó a radio Universidad que Rosel Janet “no estaba deprimida como dicen. Alguien que se ama no se quita la vida. Y ella amaba a su hijita, la conozco y sé que no iba a hacer eso. Era revoltosa, peleaba y le gustaba defenderse, pero no creo en el suicidio”. El padre de Rosel Janet sostuvo que “la podrían haber matado”, porque su hija “había peleado y la habían castigado, aislado”.
En tanto, ayer por la mañana frente a Tribunales II, familiares de reclusas del Establecimiento Penitenciario Nº3 de Bouwer, organizaciones sociales y partidos de izquierda se movilizaron para exigir justicia por la muerte de López y de Elsa Medina de 62 años, otra interna que había sufrió un cuadro de descompensación hemodinámica, y debió ser trasladada a un hospital y murió. Bajo la consigna “Ni una menos en las cárceles”, los manifestantes denunciaron “abandono estatal”.
Por otro lado, la titular de la Federación Argentina de Sindicatos Policiales y Penitenciarios (Fasipp), Adriana Rearte, solicitó ayer por la tarde la “urgente intervención del Servicio Penitenciario Provincial”. En el escrito que presentó Rearte al que accedió HOY DÍA CÓRDOBA se indica “que se viene desarrollando desde hace un largo período de tiempo situaciones complejas que escapan a la misión del Servicio Penitenciario y otras Obligaciones, pero que de continuar este escenario en que la Plana Mayor Penitenciaria, como voz oficial se empeña en esconder repetidamente del conocimiento público, puede llegar a suscitarse una situación descontrolada que ponga en serio riesgo de vida a Personal Penitenciario e internos carcelarios”. Rearte había denunciado que, durante el fin de semana, se produjeron intentos de motín y agresiones hacia la directora del penal de mujeres de Bouwer, Marisa Alé. Sin embargo, Alé desmitió los trascendidos.
Esta mañana, el Ministerio de Justicia de la Provincia a cargo de Juan Martín Farfán, confirmó el alejamiento de Alé del cargo. “Tomamos la decisión mientras que realizan las investigaciones y responsabilidades”, indicó el funcionario en declaraciones radiales.