Un grupo de 17 tamberos y la filial de la productora láctea suiza Nestlé produjeron la primera leche en polvo con certificación orgánica del país, tras un trabajo realizado a lo largo de tres años durante los cuales los productores reconvirtieron su modo de cuidar y alimentar a las vacas, para hacerlo más sustentable.
«La producción de este tipo de leche implica respetar los estándares de producción orgánica cuidando el ecosistema del tambo, respetando el comportamiento natural de las vacas y sin usar pesticidas ni agroquímicos», explicaron desde la compañía.
Para lograr este desafío Nestlé asistió a 17 productores de leche durante más de tres años, con el apoyo de un equipo de técnicos especializados que funcionaron como guías.
Luego generaron acuerdos con tamberos, muchos de ellos PyMEs, para hacer una inversión conjunta enfocada en la reconversión de tierras de pastura y la alimentación del ganado vacuno.
«En Nestlé estamos sumamente comprometidos con el crecimiento y desarrollo de la Argentina. Estamos presentes en el país desde hace más de 90 años y desde entonces hemos trabajado siempre con el mismo foco: seguir creando futuro al desarrollar productos de alta calidad y de valor agregado para los consumidores argentinos», señaló el presidente de la empresa para Argentina, Paraguay y Uruguay, Gian Carlo Aubry.
Precisó que «hace más de tres años comenzamos este camino de innovación para desarrollar dos segmentos que no existían en la industria láctea argentina y que además sin dudas tienen gran potencial para la exportación: la leche orgánica y la leche A2».