Ángel El Pato” Cabrera fue condenado ayer a dos años de prisión efectiva por golpear y ejercer violencia de género contra su ex pareja Cecilia Torres Mana. Además, se sumó el dictamen de su prisión preventiva en el marco de otra causa donde se lo investiga por amenazas y desobediencia a la autoridad.
Tras una semana de debate, y con el cierre de los alegatos, la Cámara Segunda del Crimen determinó que Cabrera fue culpable por los delitos de lesiones leves calificadas por el vínculo y por mediar violencia de género que pesaban en su contra y estipuló una condena sin la posibilidad de requerir una prisión condicional o domiciliaria.
A primera hora de la jornada de ayer, la fiscal de Acusación Laura Batistelli, había solicitado a la jueza Mónica Traballini, que condene al golfista a dos años de prisión. Durante su exposición, la fiscal Batistelli hizo un recorrido por toda la vida del acusado, los hechos y señaló que Cabrera intentó ocultarse y se mantuvo prófugo de la justicia cordobesa, además de que tiene un concepto degradante” de la mujer.
También, manifestó que en este tribunal se ha hablado mucho de la venganza, de la presión de los medios, de la postura vengativa del Poder Judicial, de la construcción de un monstruo en el señor Cabrera. Yo voy a repetir algo que quiero quede muy claro: la única institución que vio al señor Cabrera como Ángel Leopoldo Cabrera ciudadano y hombre fue el Poder Judicial, nadie más”.
Por su parte, en el segundo turno, le tocó realizar su alegato al abogado querellante Carlos Nayi quien mantuvo la postura de la prisión efectiva y adhirió al pedido que realizó la fiscal. En tanto, momentos previos a la audiencia, Nayi enfatizó que los hechos son muchos más graves de lo que estimaba la querella desde la acusación privada”. Estamos hablando del rostro más perverso de la violencia física, sistemática, psicológica y sexual”, agregó el letrado.
Por otro lado, e independientemente de la condena, Cabrera iba a continuar privado de su libertad en la cárcel de Bouwer debido a que fue dictada su prisión preventiva en otra causa donde está involucrado y a pedido del fiscal de Violencia Familiar Cristian Griffi. Griffi lleva adelante otras denuncias contra el ex golfista que también fueron realizada por su ex pareja Torres Mana. En esta línea, tras considerar que existe riesgo procesal de fuga o entorpecimiento de la investigación, dictó la prisión preventiva y lo imputó por amenazas” y desobediencia a la autoridad reiterada”.