El ministro de Salud, Ricardo Pieckenstainer, encabezó la reunión de la Mesa Sanitaria con municipios y comunas, para el seguimiento de la situación de dengue y chikungunya en la provincia.
Junto a responsables de las áreas de salud y ambiente de las distintas localidades, se actualizaron los datos y los aspectos más importantes del manejo de las enfermedades transmitidas por mosquitos.
En esta oportunidad, el titular de la cartera sanitaria expresó: “Este espacio nos permite articular con cada uno de los municipios las acciones para dar respuesta a este contexto epidemiológico. Además, de preparar la contingencia invernal, ya que es probable que se puedan solapar ambas situaciones, como ocurrió años anteriores”.
Durante el encuentro, se informó que esta temporada -con la circulación sostenida de dengue durante todo el 2023 en el noreste argentino- el incremento de casos en nuestra provincia ocurrió de manera más temprana.
Los primeros casos autóctonos comenzaron a registrarse a partir de la segunda semana de diciembre (semana epidemiológica 50), mientras que en otros brotes esto sucedió hacia fines de enero o principios de febrero.
“A nivel nacional y provincial se observa un incremento importante en el número de casos con respecto al mismo período del año pasado, por lo cual se espera que el brote epidémico de dengue sea mayor. Sobre todo, teniendo en cuenta que este año se adelantó nueve semanas el inicio de la detección de casos”, explicó la subsecretaria de Estrategias Sanitarias y Acceso a la Salud, Laura López.
Hasta el momento, en la provincia se han confirmado 1707 casos de dengue, de los cuales 1299 son autóctonos. El 30 por ciento de los casos correspondió al rango etario entre 30 y 44 años, seguido por el grupo de 15 a 29 años, con el 27,6%. El 7 por ciento de todos los casos requirió internación.
Los casos se notificaron desde 123 localidades, pero hubo casos autóctonos en 72. Los departamentos San Justo (127 /100.000 habitantes), General San Martín (108/100.000) y Capital (52/100.000 casos) registran las tasas de notificación más altas de la provincia.
En tanto, el 48,7% de los casos de dengue tuvieron residencia en el área metropolitana.
A lo largo de la reunión, se brindaron precisiones técnicas acerca de la modalidad de las acciones de mitigación y control. Se remarcó que la fumigación no es una medida preventiva, y que la eliminación de potenciales criaderos de mosquitos es la estrategia más costo-efectiva.
Por tal motivo, se invitó a los municipios a realizar tareas especiales de promoción en terreno el 15 de marzo, en el marco de una campaña provincial. “Este mosquito no se aleja a más de 40 metros de su fuente de alimentación, que somos los humanos, por eso ponemos el énfasis en la prevención dentro de las viviendas”, añadió López.
La funcionaria también recordó que los síntomas más frecuentes fueron fiebre, dolores musculares y dolor de cabeza, por lo que reiteró la importancia de la consulta temprana ante cualquiera de estos signos. Al respecto, subrayó la necesidad de continuar fortaleciendo el primer nivel de atención para un diagnóstico clínico y una notificación oportunas, y para el reconocimiento de los signos de alarma.
Finalmente, se abordaron aspectos relacionados a otras enfermedades, como leishmaniasis, encefalitis equina, encefalitis de San Luis y síndrome urémico hemolítico.
La reunión contó con la presencia del secretario de Gobierno, Augusto Pastore; del secretario de Prevención y Promoción de la Salud, Diego Alonso; el subsecretario de Salud, Sebastián Faule, y el director del Instituto de Investigación y Planificación Sanitaria; Gustavo Klein.