La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió ayer que el aspartamo, un edulcorante artificial muy usado en las bebidas gaseosas y otros productos alimentarios, es «posiblemente» cancerígeno para los seres humanos.
«No estamos aconsejando a las empresas que retiren sus productos, ni aconsejando a los consumidores que dejen de consumirlos por completo», aclaró Francesco Branca, director del departamento de Nutrición, Salud y Desarrollo de la OMS, en la presentación de dos evaluaciones sobre este edulcorante.
La Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer de la OMS evaluó por primera vez el nivel de peligro del aspartamo y allí, los expertos concluyeron que el edulcorante «puede ser carcinógeno para los seres humanos», según consignó la agencia AFP.
«El público en general no debería preocuparse del riesgo de cáncer asociado a un producto químico clasificado en el grupo 2B». La decisión de incluir el aspartamo en ese grupo se tomó sobre la base de «indicaciones limitadas» relacionadas con el cáncer en humanos, en particular, para el carcinoma hepatocelular, un tipo de cáncer de hígado, según la OMS.
«Las indicaciones limitadas sobre el carcinoma hepatocelular provienen de tres estudios» realizados en Estados Unidos y en diez países europeos. Se trata de los únicos estudios epidemiológicos sobre el cáncer de hígado», precisaron. No obstante, se indicó que «se necesitan estudios adicionales para aclarar aún más la situación».
El Comité Mixto de Expertos en Aditivos Alimentarios de la OMS y la FAO (la Agencia de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) también evaluó entre el 27 de junio y el 6 de julio, los riesgos asociados con el aspartamo.
En este caso, concluyó que los datos no proporcionaban motivos suficientes para justificar una modificación de la dosis diaria permitida establecida desde 1981.
Esta dosis es de un máximo de 40 mg por kilo de peso corporal y significa que una persona puede consumir aspartamo «sin riesgo» dentro de ese límite.
Un adulto de 70 kg debería consumir entre 9 y 14 latas diarias de un bebida «light» (con 200 a 300 mg del edulcorante) para exceder la dosis permitida, suponiendo que no haya ingerido aspartamo contenido en otros productos.
«El problema se plantea para los grandes consumidores» de productos que contienen aspartamo, advirtió, pero «los resultados no indican que un consumo ocasional presente un riesgo».
Este edulcorante sin valor nutritivo es muy utilizado desde los años 1980 y está presente en muchos productos, desde bebidas con pocas calorías, conocidas como «light», hasta platos preparados, chicles, gelatinas o helados. Y también en medicinas, como las pastillas contra la tos y en los dentífricos.