Una alimentación saludable y planificada es lo que se recomienda para las próximas fiestas de Navidad y Año Nuevo, porque, a diferencia de otros años, muchas personas llegan con un exceso de peso que no es habitual debido a un desequilibrio alimentario y la falta de actividad física que se acentuó durante varios meses producto del aislamiento social preventivo por el coronavirus.
Además, a la hora de planificar los mencionados encuentros las personas no deben olvidar las recomendaciones de distanciamiento social, por lo cual se aconseja que al elegir el menú deben tenerse algunas consideraciones.
Entre ellas, hay que considerar no recurrir a las comidas del tipo bufet para evitar que las fuentes de alimentos pasen por muchas manos y que la manipulación de alimentos se realice de forma correcta al igual que al servir los platos y al preparar la mesa. Al mismo tiempo, se sugiere que los comensales identifiquen correctamente sus cubiertos y vasos con etiquetas a fin de no confundirse.
También se bebe tener en cuenta qué tipo de alimentos estarán presentes en la mesa tradicional de estas festividades, que generalmente incluyen algunos que son muy calóricos y con elevado contenido de grasa.
Para tener en cuenta, el lechón, la pavita rellena o el carré de cerdo, así como los turrones, el pan dulce, las garrapiñadas y el maní con chocolate son algunos ejemplos de alimentos que trastocan la dieta habitual, por lo cual se recomienda no ingerirlos en exceso.
Los especialistas sugieren elegir platos que incluyan una variedad de vegetales, frescos e ideales para las altas temperaturas de verano y también es recomendable consumir abundantes frutas y verduras, preferir preparaciones frías, con cortes de carnes magros o pollo sin piel.
Otra de las cosas a tener en cuenta es hidratarse bien, preferentemente con agua o en su defecto bebidas sin azúcar, moderar el consumo de alcohol y cuidar el tamaño de las porciones.
Algunas opciones recomendables en cuanto a la entrada son, Vitel toné, tomates rellenos, vinagretas de vegetales o carnes, mientras que para el plato principal se sugiere pollo al horno, asado a la parrilla, mil hojas de vegetales o lasaña de berenjenas.
En cuanto a las guarniciones, se puede optar por ensaladas con base de hojas verdes y agregar otros vegetales, legumbres, pasas de uva, tomates secos, vegetales grillados (al horno o en la parrilla).
Para postre, se recomienda ensalada de frutas a la cual se le puede agregar helado y para la mesa dulce tradicional hay que elegir todo con moderación, mientras que se pueden preparar platos pequeños individuales para poder controlar la cantidad.
Comer con moderación para impedir los malestares gastrointestinales
Evitar ingestas excesivas a la noche, moderar el consumo de alcohol, evitar bebidas con azúcar agregada y aumentar la ingesta de agua son sólo algunas de las recomendaciones de una especialista del Hospital de Clínicas de Buenos Aires para evitar malestares gastrointestinales durante las fiestas de Navidad y Fin de Año.
«Un problema recurrente es la ingesta excesiva de alimentos en un corto período de tiempo que suele favorecer síntomas como acidez, dolor y distensión», indicó la licenciada Alexa Gómez, jefa de residentes del Departamento de Alimentación y Dietética del Hospital de Clínicas. Y agregó que «esto suele estar acompañado de saltarse las comidas del resto del día festivo o ingerir pocos alimentos llegando con mucha hambre al momento de la fiesta. Cuando esto ocurre es más difícil controlar las porciones, aún más si la variedad de platos es muy grande».
Mediante un comunicado del centro de salud, la especialista señaló que «por eso es importante realizar las comidas previas incluyendo frutas, verduras y cereales integrales». «Un consumo elevado de grasas de origen animal como cortes de carne (tira de asado, lechón, achuras, piel de pollo o pavita), manteca, mayonesa y crema de leche también puede contribuir a la sintomatología digestiva», sostuvo.
En cuanto a las bebidas, Gómez sostuvo: «La ingesta de líquidos es otro aspecto importante a considerar en las fiestas. Las altas temperaturas de diciembre en Argentina hacen que tengamos más sed. Sin embargo, las bebidas que suelen estar en la mesa de las fiestas son bebidas alcohólicas y azucaradas. Esto lleva a que muchas personas tengan un consumo excesivo tanto de alcohol como de calorías extras y vacías en estas fechas».
En este sentido, explicó: «Llamamos calorías vacías a aquellas que nos aportan energía sin ningún nutriente de relevancia como por ejemplo vitaminas o minerales». En este contexto, indicó que «tomar agua a lo largo de todo el día de las fiestas y también incorporar varios vasos a lo largo de la noche nos pueden ayudar a evitar tomar un exceso de bebidas calóricas por sensación de sed».