PEKÍN. – El enfrentamiento de Estados Unidos con China se sigue extendiendo a nuevos terrenos diplomáticos luego de que la Administración de Donald Trump responsabilizara al gobierno de Xi Jinping por la propagación mundial del coronavirus. Ayer, la crisis bilateral sumó un nuevo ítem luego de que Estados Unidos anunciara la revocación del estatus especial de Hong Kong como región autónoma de China, lo que allana el camino para eliminar los privilegios comerciales del mayor centro financiero de Asia. La medida se dicta como una respuesta a la controvertida ley de seguridad que Pekín impulsa para la ex colonia británica, que ha producido encendidas protestas en Hong Kong.
La respuesta del ministro de Defensa chino, Wei Fenghe, no se hizo esperar y poco después advirtió que la confrontación estratégica entre China y Estados Unidos ha entrado en un periodo de alto riesgo”. Estados Unidos ha intensificado su política de confrontación con China desde que comenzó el brote de coronavirus”, dijo el ministro Wei durante un foro al margen de la Asamblea Popular Nacional; donde el jefe de la división de armamento de las Fuerzas Aéreas chinas (EPL), Zhu Cheng, agregó que la rivalidad entre China y Occidente se está intensificando en la esfera cibernética, la espacial, la de aguas profundas y la biológica”. El domingo, Pekín advirtió que Washington está llevando las relaciones bilaterales al borde de una nueva guerra fría” y acusó a Washington de usar cada oportunidad para atacar y desprestigiar” a China.