El papa Francisco afianzó ayer su línea de papado con el nombramiento de 21 nuevos cardenales, que serán “creados” el 8 de diciembre en un solemne Consistorio y que podrían participar en un eventual cónclave que elija a su sucesor.
Entre ellos hay varios latinoamericanos, uno de los cuales es el arzobispo argentino Vicente Bokalic Iglie de Santiago del Estero, primado de la Argentina. Los otros son el arzobispo de Porto Alegre, Brasil, Jaime Splengler; el de Lima, Carlos Castillo Mattaoglio y el de Guayaquil, Gerardo Cabrera Herrera.
El papa también creará como cardenal a su nuncio apostólico Angelo Acerci, al organizador de sus viajes por el mundo, monseñor Gorge Jacob Koovakad, al fraile teólogo británico Timothy Peter Joseph Radcliffe y al subsecretario de la sección Migraciones del Vaticano, Fabbio Baggió.
Hasta hoy son 92 los cardenales menores de 80 años que pueden votar y ser elegidos en un cónclave, en comparación con los 24 nombrados por Benedicto XVI y seis por san Juan Pablo II.