El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, aseguró ayer que las fuerzas ucranianas lograron “nuevos avances” en la región rusa de Kursk y estima en más de 80 las localidades tomadas desde el inicio de la incursión, que se habría traducido también en la captura de decenas de soldados.
Zelenski, que encabezó una reunión ayer con los mandos militares, aseguró que las tropas ucranianas siguen llenando el “fondo de intercambio”, en aparente alusión a las capturas de militares rusos con vistas a un potencial canje con prisioneros ucranianos.
Estos últimos avances han permitido ya a Ucrania establecer una oficina de mando en Kursk, como confirmó Zelenski, que llamó también a no perder de vista el frente de combate en la región ucraniana de Donetsk. De hecho, apuntó que esta zona es prioritaria en cuanto a suministros.
Por otra parte, el presidente ucraniano aprovechó la reunión para dar la nacionalidad a quienes, pese a no ser ciudadanos ucranianos, están combatiendo sobre el terreno del lado de los intereses de Kiev, medida que también sería extensible a su familia directa. En cambio, “quien sirva a (Vladimir) Putin, justifique su guerra o ayude al mal no se merece conservar todo lo que le ha dado el Estado ucraniano”, dijo.