El Gobierno reunirá este lunes a los ministros de Desarrollo Social de todas las provincias para empezar a armar un programa federal de ayuda alimentaria y coordinar los programas sociales tendientes a reducir la pobreza en la Argentina. Para ello Daniel Arroyo convocó a las 11 en su cartera a los ministros del área de todas las provincias, a fin de acordar un esquema de prioridades y distribución coordinada de fondos sociales.
También busca un esquema de controles de transparencia de distribución de los planes y la anunciada tarjeta alimentaria para sustentar los problemas de pobreza que según el último informe de la UCA llegan al 40%. La tarjeta, está prevista para cerca de dos millones de madres de niños menores de 6 años en situación de pobreza que, a diferencia de la AUH, “no serán para extraer dinero” sino “un adicional” para gente que ya asiste a comedores y pueda adquirir más alimentos.
En ese contexto, el Gobierno trasladó al próximo viernes la convocatoria del Consejo Federal Argentina Contra el Hambre (formada por empresarios, sindicalistas, dirigentes políticos y sociales, además de religiosos) que iba a desarrollarse hoy por la tarde en la Casa Rosada. La idea es que la actividad del Consejo se sustente en una ley que sea girada al Congreso. “A partir del miércoles se va empezar a instaurar el Plan contra el Hambre y eso va a reactivar sensiblemente la actividad en todo el país en lo relativo al consumo”, expresó ayer Fernández, en la que sostuvo que el dinero que se destine a este plan será “una inyección de consumo”.