La Confederación General del Trabajo (CGT) se movilizó en el centro porteño para celebrar con un multitudinario acto el Día de la Lealtad peronista, que para la ocasión no tuvo oradores pero en el que se leyó un documento para pedir «políticas económicas que promuevan la generación de empleo genuino».
Los principales líderes de la central, entre ellos Héctor Daer y Carlos Acuña, protagonizaron la movilización que tuvo su epicentro en la intersección de Paseo Colón e Independencia, donde se ubica el Monumento al Trabajador. A su vez, también estuvo el resto de la cartera de la central y el camionero Hugo Moyano, quien hace años había abandonado la conducción cegetista por diferencias con sus integrantes.
No obstante, su hijo Pablo Moyano integrará a la brevedad la próxima conducción colegiada de la central, en el marco de la reunificación que se inició entre distintos sectores de cara a los comicios de la CGT del 11 de noviembre.
En este sentido, todo indica que el triunvirato se completará con Héctor Daer (Sanidad) y Antonio Caló, de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
En tanto, desfilaron por el centro porteño distintos pilares de los sindicatos cegetistas, como Sanidad, Camioneros, UOCRA, SMATA, Bancarios, UOM y UDA, entre muchos otros. También participaron las organizaciones sociales, representadas a través de su flamante sindicato, la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular).
Si bien no hubo oradores, se leyó un documento confeccionado por las autoridades de la CGT, en el que se aborda la situación actual de la Argentina, a menos de un mes de las elecciones legislativas del 14 de noviembre.
«El peronismo debe promover la alianza entre la producción y el trabajo, única fórmula que garantiza un crecimiento sostenible con justicia social. Para lograrlo es imprescindible profundizar el diálogo social institucionalizado como instrumento necesario», señaló la central en el escrito.
Y agregó: «No para diagnosticar la magnitud de la crisis ni sus efectos en el tejido productivo y social de nuestro país, sino para elaborar en conjunto los consensos que nos permitan poner el empleo productivo en el centro de las políticas públicas para superar la situación que hoy margina a los sectores más desprotegidos, que profundiza las desigualdades sociales y condiciona el crecimiento uniforme y equitativo de nuestro país”.
En el texto, la CGT pide también «un compromiso de responsabilidad social empresaria que le cabe a los sectores de mayor concentración económica» y «la reconstrucción de un Estado presente, regulador de la economía y promotor del desarrollo económico y social».
«La Argentina y nuestro gobierno afrontan una instancia decisiva para superar la crisis económica y social heredada y agravada dramáticamente por los efectos de la pandemia. La CGT es la reserva desde donde el Movimiento Nacional puede reconstruir el tejido social y fortalecer la política como herramienta transformadora», señalan.
Y concluye: «Llegó la etapa de poner en marcha políticas que sienten las bases de la transformación económica y social de nuestro país. Es tiempo de Justicia Social, compromiso irrenunciable y militante del Movimiento obrero argentino».
«Con esta marcha multitudinaria de la CGT a la que hemos convocado dentro del Consejo Directivo, y que denominamos ´Por el Desarrollo, la Producción y el Trabajo´, estamos presentes no solamente ratificando lo que significó para los trabajadores el 17 de octubre sino también para acompañar al Gobierno Nacional en la gestión que está llevando adelante, y la CGT, como parte del movimiento obrero organizado, va a colaborar y seguir prestando el apoyo para poder llevar la tranquilidad a muchos compatriotas que hoy necesitan trabajo», afirmó el secretario general de Obras Sanitarias, José Luis Lingieri, en declaraciones a la prensa antes de la lectura del documento.
En este marco, la CGT además buscó diferenciarse de la marcha del día anterior que organizó el kirchnerismo: «El de ayer fue un acto multicolor, el de hoy es el movimiento obrero», planteó Lingeri.