El presidente Alberto Fernández logró ayer su primer logro en la Cumbre de Líderes del G20 pese a los contratiempos de salud que frustraron en parte su participación en el encuentro global, ya que China le confirmó una ampliación del swap que permitirá al Banco Central argentino disponer del equivalente a unos US$ 5.000 millones y engrosar las reservas en un 13%.
El propio Fernández anunció la noticia tras “una muy buena reunión” que mantuvo con su par de la República Popular China, Xi Jinping, quien le confirmó allí la autorización a que la Argentina disponga de 5.000 millones de dólares como parte del Swap.
“Fue una muy buena reunión, no es la primera, y hablamos de temas que nos preocupan, temas bilaterales, los dos somos profundos defensores del multilateralismo y de la necesidad de que el desarrollo incluya a las personas”, dijo Fernández en una conferencia de prensa en el hotel Melia de Bali, junto al ministro de Economía, Sergio Massa, y el canciller Santiago Cafiero.
“Hoy lo que nos informó el presidente Xi es que había autorizado al Gobierno chino a que la Argentina disponga libremente de 25.000 millones de yuanes, que significan 5.000 millones de dólares. Es una gran noticia, agradecimos profundamente. El presidente Xi me explicó que era una excepción absoluta que hace China para con la Argentina y así lo tomamos y lo agradecemos”, destacó.
El segundo tema que trataron “era un reclamo que tenemos por una deuda que se mantiene de China por las reservas Kirchner y Cepernic”, agregó y puntualizó: “Admitieron que esa deuda estaba pendiente y dio instrucciones al Consejo de Desarrollo para que rápidamente se pongan en marcha para cubrir esa deuda”. “Fue un muy buen encuentro, como suelen ser los encuentros con el presidente Xi y para nosotros un motivo de alegría haber podido encontrar respuesta a dos temas que nos preocupaban”, concluyó.
Un swap (“intercambio”, “cambio” o “canje” en inglés) es un acuerdo financiero en el que una de las partes se compromete a pagar con determinada periodicidad una serie de flujos monetarios a cambio de recibir otra serie de flujos de la otra parte, en este caso Argentina.
La excepción hecha por Xi revela que “hay una decisión (del gobierno chino) de reforzar la relación con la Argentina”, enfatizó el ministro de Economía, Sergio Massa; quien explicó que “lo que representa el swap, o la ampliación del uso del swap para la Argentina, es contar con 5.000 millones de dólares más de reservas para la acción del Banco Central”.
El swap con China se suscribió originalmente en 2011, durante el segundo mandato de Cristina Kirchner, y equivalió a un crédito por US$ 10.200 millones por tres años, con posibilidad de renovación, lo que se concretó en 2014 por US$ 11.000 millones, en 2018 por la misma cifra y se amplió en 2020 a US$ 18.700 millones.
Una descompensación por una gastritis
El presidente Alberto Fernández debió ser asistido ayer en Bali por una gastritis erosiva con sangrado, ante lo cual el canciller Santiago Cafiero debió reemplazarlo en las dos intervenciones previstas en la cumbre de líderes del G20 que se desarrolla en la isla de Indonesia, aunque una vez recuperado retomó su actividad.
Fernández arribó a las 9:15 hora local (22:15 del lunes de Argentina) y en la Bienvenida Oficial dialogó, entre otros, con el mandatario de España, Pedro Sánchez; la presidenta de la Unión Europea (UE), Ursula von der Leyen; y la Directora Gerente del FMI, Kristalina Georgieva, con quien hoy mantendrá un encuentro.
Luego, sufrió un episodio de hipotensión y mareos previo al inicio de la Cumbre del G20 y fue trasladado en una ambulancia al Sanglah General Hospital de Bali, donde se determinó el cuadro de gastritis. Fernández tuvo “un episodio complicado” porque “sangró mucho y eso le provocó la descompensación”, explicaron los voceros.
El mandatario tuvo luego una comunicación telefónica con la vicepresidenta Cristina Kirchner, quien lo llamó para interiorizarse de su salud, aunque informó que “les agradezco a todos por la preocupación, estoy bien, estoy trabajando bien”.