El presidente Alberto Fernández le pidió ayer al mandatario de los Estados Unidos, Joe Biden, que mantenga el respaldo de su Administración a la Argentina ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), en medio de la fuerte sequía que azota a nuestro país, en una cumbre bilateral donde el mandatario argentino pudo ganar aire para su alicaída gestión.
Biden recibió a Fernández en el emblemático Salón Oval de la Casa Blanca en un momento crítico para la economía argentina que encima se encuentra en la antesala de las elecciones presidenciales. La mera reunión ya fue un gesto de respaldo explícito de Biden hacia la gestión de Fernández, quien se convirtió en el primer presidente peronista desde Néstor Kirchner en sentarse al lado de un mandatario norteamericano en la Casa Blanca.
El encuentro ofreció la oportunidad de fortalecer una hoja de ruta común para la relación bilateral y la cooperación entre ambos países –incluido el respaldo de Estados Unidos en el FMI–, y abarcó las tensiones geopolíticas latentes en el planeta, incluida la invasión de Rusia a Ucrania, la defensa de la democracia y el papel de China en América latina y en Argentina.
Fernández se mostró afín a Biden en sus posiciones geopolíticas: condenó sin miramientos la “invasión” de Rusia a Ucrania y coincidió con su agenda de lucha contra el cambio climático. “La guerra ha generado daños inconmensurables a la economía mundial. Tenemos que trabajar para que esa guerra termine, deje de llevarse vidas humanas y la economía del mundo se recupere”, afirmó Fernández, quien resaltó que “la paz es urgente”.
El mandatario aprovechó para meter la agenda argentina: “La preocupación por el cambio climático es también una posición común. Argentina está padeciendo la peor sequía desde 1929. Esto complicó mucho nuestra economía y esa nueva realidad se la estamos planteando a los organismos de créditos”, expresó Fernández, quien le pidió a Biden que mantenga su respaldo a la Argentina en el FMI “como lo hicieron hasta ahora”.
“En primer lugar quiero agradecer la ayuda al gobierno de Estados Unidos por la ayuda brindada con vacunas durante la pandemia. En segundo término, agradecer el apoyo que nos brindaron en los organismos multilaterales”, aseguró el mandatario argentino, quien agregó con una sonrisa: “Espero que nos sigan apoyando”.
La frase, en realidad, llegó unas horas después de que el ministro de Economía, Sergio Massa, mantuviera una reunión en el FMI para asegurar que el programa argentino se mantenga a flote (ver en página 4); pero reveló indirectamente la fragilidad de la situación argentina.
En busca de un cambio en los organismos
“Pudimos tener una muy buena reunión con el equipo de trabajo del presidente Biden”, aseveró Alberto Fernández al término de una larga jornada de trabajo.
En una conferencia de prensa, Fernández aseguró que Biden le garantizó su respaldo ante el Fondo Monetario Internacional y destacó su postura a favor de que “los organismos internacionales de crédito deben darse una política específica para los países de renta media, porque siempre quedamos postergados en la distribución” de los recursos.
“Yo le advertí que los países de renta media cargan con el 60% de la pobreza del mundo, con lo que postergarlos es una enorme injusticia”, amplió Fernández, quien indicó que “Biden compartió la idea y me dijo que trabajemos juntos porque cree que eso es parte del cambio que debe llevar adelante el sistema internacional”.
Por otro lado, Fernández desestimó una denuncia del senador de Estados Unidos Ted Cruz para que se “sancione e investigue” a la vicepresidenta Cristina Kirchner tras la condena en la causa Vialidad, al afirmar que “marginales políticos hay en todos lados” y definir la iniciativa como “producto de un delirante”.
Un proyecto de asociación para producir alimentos
“Esta reunión es una oportunidad para reafirmar que nada está fuera de nuestro alcance si trabajamos juntos”, aseveró el presidente Joe Biden al recibir a su par argentino, con quien compartió una reunión privada y un encuentro más extenso con las delegaciones de ambos países.
“Presidente, bienvenido, es genial verlo”, arrancó Biden y aseveró que “esta reunión ha tardado mucho en llegar”. “Creo que tenemos una enorme oportunidad para aumentar nuestra integración y nuestro intercambio económico”, agregó el líder demócrata, quien mencionó a la energía, la tecnología y los minerales críticos como el litio como los intereses de Estados Unidos.
Por su parte, Fernández respaldó la ofensiva de Biden para regular el uso de armas al advertir que “se trata de un problema que tiene el mundo”. Luego, Fernández aseguró que “hablamos la posibilidad de unir esfuerzos entre Estados Unidos, México, Brasil y Argentina para hacer un gran proyecto de alimentos para el mundo (…). Fue un muy buen encuentro que nos debíamos y estoy convencido que se han abierto las puertas para un trabajo estratégico”, completó.
En la declaración final, ambos mandatarios resaltaron la fortaleza de la asociación así como los valores compartidos por sus gobiernos en cuanto a inclusión, democracia, protección de los Derechos Humanos y las acciones para enfrentar el cambio climático.