En medio de la interna oficialista que parece no haber llegado a sin fin, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner encabezaron actos distintos en el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, al cumplirse el sábado último el 40° aniversario del inicio del conflicto bélico. Bajo el lema “Malvinas nos une”, el Gobierno nacional organizó una serie de actos en todo el país para recordar los 40 años de la guerra, pero el Presidente y la Vicepresidenta tuvieron actividades separadas.
Desde el predio de la antigua Escuela de Mecánica de la Armada (ex Esma), que ofició de centro de tortura durante el último régimen militar, Fernández encabezó el sábado pasado la actividad oficial en el Museo Malvinas, donde se entregaron medallas a veteranos. Al comenzar su discurso, pidió un aplauso para los ex combatientes y sus familiares. “En su nombre quiero dar tributo a los oficiales que pelearon dignamente en Malvinas”, dijo y mencionó al ex general Martín Balza, presente en el lugar.
Luego agradeció a los ex presidentes Evo Morales (Bolivia), Fernando Lugo (Paraguay) y José Mugica (Uruguay), asistentes al acto. Así, Fernández reconoció a las naciones latinoamericanas su solidaridad con el reclamo argentino. A ellos se sumaron las declaraciones del presidente chileno Gabriel Boric, quien en las últimas horas reafirmó su apoyo “de manera clara y decidida” a la reivindicación de Argentina sobre las islas.
“Leí una frase de hijas de ex combatientes, que sintetizan mucho: ‘Orgullo y gratitud por nuestros combatientes”. Las comparto y sumo la palabra horror por la decisión irresponsable de una dictadura que mandó soldados a la muerte en defensa de la soberanía”, siguió el mandatario durante la ceremonia. “El Nunca Más lo extendemos también a nuestros héroes para que nunca más caigan en el silencio por parte de ningún gobierno”, continuó el jefe de Estado.
En el final de su discurso, el mandatario nacional llamó al Reino Unido a que “cumpla con la Resolución 2065 de la ONU, que desde 1965 recomienda a ambas partes sentarse a negociar la cuestión”. En su reclamo al gobierno inglés, Fernández volvió a exigir una “solución negociada y pacífica” al conflicto de soberanía por las islas que se mantiene vigente. Además, pidió al Reino Unido que “abandone la injustificada presencia militar” en las islas Malvinas, ya que es una “zona de paz y de cooperación”.
En la misma jornada y por medio de la red social Twitter, el primer ministro británico, Boris Johnson, remarcó que el “compromiso” del Reino Unido “con los isleños es tan firme como en 1982” y defendió el derecho a la autodeterminación de los kelpers. “Un día como hoy hace cuarenta años la junta militar argentina invadió y ocupó las islas Falklands (Malvinas)”, afirmó el mandatario europeo.
En la ex Esma, junto al jefe de Estado estuvieron el canciller Santiago Cafiero; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; la ministra de las Mujeres, Género y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta; y el ministro de Defensa, Jorge Taiana. Todos entregaron 15 medallas de reconocimiento a ex combatientes de Malvinas y familiares de caídos.
El Congreso homenajeó a los ex combatientes
El mismo sábado y horas después del acto que ofreció Alberto Fernández en el Museo de Malvinas, la vicepresidenta Cristina Kirchner encabezó otro acto en el Congreso de la Nación en el marco de los 40 años de la guerra, en el que se realizó una entrega de diplomas a modo de distinción a los 17 ex combatientes que trabajan en el Palacio Legislativo.
En la ceremonia, que estuvo organizada en el Salón Azul del Senado, la titular de la Cámara Alta estuvo acompañada en el escenario por el presidente de Diputados, Sergio Massa, quien horas antes sí había participado de la actividad oficial junto al Presidente.
En su mensaje, Kirchner afirmó que en “la defensa de los intereses de la patria no hay una cuestión de ideología” y llamó a diferenciar “las disputas políticas de lo que es irrenunciable” para el país como el reclamo de soberanía sobre las islas. Afirmó además que en cuestiones de geopolítica “no hay ni buenos ni malos”, y que todo se reduce a una cuestión de intereses.
Luego recordó que los ex combatientes junto a las Madres de Plaza de Mayo fueron “los que parieron la democracia”. “Malvinas terminó siendo el punto final a la historia del partido militar en Argentina. No es un espíritu antimilitarista”, sentenció.
El siguiente en tomar la palabra fue Massa, quien inició su intervención dando cuenta de “lo difícil que es escapar a la emoción y al orgullo que representa cada uno de nuestros caídos y veteranos”. “La sociedad argentina en su conjunto tiene la responsabilidad y la obligación de pedir perdón”, afirmó el diputado.
Para Negri “se quebró el poder”
El titular del bloque de Diputados de la Unión Cívica Radical (UCR), Mario Negri, opinó que “debe ser la primera vez en democracia que la conmemoración de lo sucedido en las Islas lo toman como una pelea de poder”, en referencia a los actos que protagonizaron por separados el presidente Alberto Fernández y su vice, Cristina Kirchner.
“No tiene nombre no hay forma de justificarlo, me parece una falta de respeto a la memoria”, indicó ayer Negri en declaraciones radiales. Asimismo, señaló que “se quebró el poder en la Argentina” y advirtió que “este Gobierno debe tener mucho cuidado con no deteriorar cada vez más la debilidad que tiene”. Con respecto al rol de Juntos por el Cambio, Negri destacó: “Nosotros tenemos que apostar a la institucionalidad”.