Gobernadores electos de diversos espacios políticos expresaron esta noche su voluntad para «acompañar» la gestión del presidente electo, Javier Milei, aunque ratificaron que van a «cuidar» los intereses de sus provincias y pregonaron por «salir de la cultura de la polémica e ir hacia el diálogo». Así lo manifestaron seis dirigentes provinciales en una nota para el canal televisivo TN.
En este marco, el gobernador electo de Córdoba, Martín Llaryora, indicó: «Nuestro rol hoy no es de gobernar (la nación) pero vamos a acompañar» a Milei.
El dirigente de Hacemos Unidos por Córdoba destacó: «Los argentinos votaron y nosotros no tenemos que poner piedras ni palos en la rueda, tenemos que apoyar y cuidar los intereses de Argentina».
Por otra parte, consideró que «no se puede cortar la obra pública, Argentina para crecer necesita los gasoductos, sería una idea terriblemente mala cortar la obra pública».
Llamó a «cumplir los compromisos» en materia de infraestructura y afirmó que en Córdoba no cortarán la obra pública, aunque analizarán si abren nuevas.
En tanto, Maximiliano Pullaro, electo por Santa Fe, indicó: «Vamos a trabajar para defender los recursos de la provincia, no voy a permitir que a Santa Fe le metan la mano en la caja, que la provincia no tenga plata para pagarle a los trabajadores del Estado o cortar las obras que estamos llevando adelante».
Sin embargo, el radical advirtió que en la provincia harán ajustes porque se necesita «un Estado más chico y eficiente».
El catamarqueño Raúl Jalil destacó que «el diálogo es el camino para la construcción de una Argentina con nuevos actores, hay un cambio generacional que se está dando en los principales partidos políticos».
«Más allá de lo que dice Milei, cuando uno llega al gobierno es distinto, cuando uno tiene que tomar decicsiones», señaló y marcó que la obra pública «tiene un efecto multiplicador».
«No vamos a hacer ajuste, el futuro es hoy», expresó el gobernador peronista y afirmó que «con gas, petroleo y economía del conocimiento Argentina va a salir adelante».
Además llamó a salir «de la cultura de la polémica e ir a la cultura de diálogo «.
El salteño Gustavo Sáenz consideró que «la gente está esperando el plan económico, eso votó, y no la discusión de quién va a cada cargo, quién tiene más poder».
En ese sentido, indicó que «el norte puede ser la gran salida de este país, es un gigante dormido que ha sido olvidado por muchos años».
«Quiero igualar oportunidades, que las mismas oportunidades que tienen aquellos que instalan una industria en el centro del país la tengamos en el norte», manifestó el líder de Identidad Salteña.
Además, señaló que se mantendrá «al margen de esa grieta que tanto lastimó a los argentinos».
«Tenemos la responsabilidad cívica y democrática de acompañar la gobernabilidad y las leyes, nos sentaremos en esta Argentina del encuentro, del diálogo, tiene que existir eso, hay que terminar con el odio que no le ha hecho bien al país», completó.
Ignacio Torres, electo por Chubut, subrayó que «eliminar la obra pública y la coparticipación es irrealizable».
Y afirmó que Milei «va a ser el presidente más condicionado de la historia de la República, va a necesitar del congreso porque va a tener una centralidad importante».
Por su parte, Rogelio Frigerio, futuro mandatario de Entre Ríos, indicó: «Queremos que a Milei le vaya bien, lo necesitamos y vamos a trabajar en todo lo que esté a nuestro alcance para darle gobernabilidad a una gestión muy débil, probablemente la más débil después de Cambiemos».