El Gobierno de Córdoba presentó ayer las armas no letales que disparan gas pimienta como nueva herramienta que se incorporará a la Policía provincial en la lucha contra el delito.
Se trata de 1.000 unidades, entre armas cortas y largas, que se comprarán y estarán disponibles para su uso en los próximos 45 días, según anunció el ministro de Justicia y Seguridad, Julián López.
El funcionario explicó que estas armas disparan el gas pimienta impulsado mediante aire comprimido y que van a ser un “complemento importante para trabajar contra el delito y patrullar las calles de Córdoba”.
En ese sentido, resaltó que hay estudios que sostienen que estas armas “permiten una mayor operatividad que las pistolas Taser”, que tiene un corto alcance y sólo impacta en un solo individuo, mientras que el nuevo dispositivo químico “alcanza hasta los 30 metros” y “el disparo se puede dispersar hasta en cuatro personas”.
Asimismo, dijo que el disparo del gas pimienta busca “neutralizar temporalmente a los agresores y de esa manera permite a los efectivos disponer del tiempo para reducir y desactivar la acción”.
López afirmó que estas armas químicas cumplen con las normas y protocolos provinciales, nacionales e internacionales, y que son de color naranja que a nivel internacional identifica a los dispositivos de seguridad no letal. Y agregó que en esta primera etapa la nueva herramienta se proveerá al personal de los Comandos de Acciones Preventivas (CAP), previa capacitación.
Esta adquisición está enmarcada en el diseño de un protocolo que realizó el gobierno provincial en el año 2020, que determina que “el uso de la fuerza por parte de las Fuerzas de Seguridad debe ser el mínimo necesario, y proporcional a la amenaza”, conforme a la Ley de Seguridad Interior, Ley Nacional de Seguridad Pública, Ley Provincial de Seguridad Pública y los Protocolos vigentes relativos al uso racional de la fuerza. Es por ello que desde comienzo de año se trabajó sobre la idea de incorporar armas menos letales, diseñadas para incapacitar o controlar a una persona y reducir al mínimo el riesgo de lesiones graves o muerte.