Luego de una ardua negociación que se mantuvo en reserva, el gobierno provincial le comunicó a la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) que descontará la mitad de los dos días de paro del 5 y 6 de agosto pasados, y que la quita salarial se concretará en tres cuotas, a partir del sueldo de agosto que se cobrará el próximo lunes.
Tras la firma del acuerdo paritario con el gremio, luego de un conflicto de 70 días, en los últimos 10 días, el sindicato y los funcionarios llaryoristas negociaron por el descuento de las 48 horas de huelga, que incluyó una masiva movilización, el pasado 6 de agosto.
Las posiciones parecían irreductibles. A través del secretario General de la Gobernación, David Consalvi, el gobernador Martín Llaryora, comunicó inicialmente que su decisión era descontar los dos días de paro. Mientras que el titular de la UEPC, Roberto Cristalli, solicitaba la postura que aprobó la asamblea provincial del gremio: pedir que no hubiera ningún tipo de descuentos.
Las discusiones fueron arduas, pero finalmente el secretario General de la Gobernación le comunicó al gremio que la decisión del Gobernador fue descontar la mitad de los días de paro, y en tres cuotas, la primera con el salario de agosto, que los docentes percibirán la semana que viene, reveló el diario La Voz del Interior. La Junta Ejecutiva de la UEPC informó a todas las delegaciones esta decisión de Llaryora.
El gremio lo comunicó como un triunfo. “Luego de una extensa discusión en la Mesa de Negociación Salarial, y pese a la ratificación del Gobierno provincial del descuento del 100% de los días de paro, nuestro sindicato ha logrado un avance significativo que implica que se descontará el 50% de lo informado para cada agente, en tres cuotas”, informó la cúpula del gremio docente.
Esta decisión de la conducción provincial del gremio fue rechazada por la delegación de la ciudad de Córdoba. El titular de la UEPC Capital, Franco Boczkowski, cuestionó la decisión de la Junta Ejecutiva de la UEPC de aceptar el descuento de los días de paro, aunque sea la mitad, y en tres cuotas.
“La decisión votada en la asamblea provincial fue rechazar cualquier tipo de descuento de los días de paro, ya que la medida de protesta se debió a la intransigencia de la Provincia. Desde la UEPC-Capital seguiremos reclamando que no se haga ningún tipo de descuento”, aseguró el gremialista, opositor a la conducción provincial del gremio docente.
El impacto
La UEPC impulsó un paro de 48 horas para el 5 y 6 de agosto pasado, que incluyó una movilización en la ciudad de Córdoba, el segundo día de la medida de fuerza. Según datos oficiales de la Provincia, los dos días de paro de los docentes tuvo un acatamiento del 55%. Mientras que para la UEPC fue superior al 70%.
Más allá de la disparidad de los números por el acatamiento, que fue importante, la mayoría de los docentes eligió hacer un día de paro. Cada jornada de descuento por paro significa alrededor del 5% del salario de los docentes. Es decir, que quienes acataron un día de protesta deberían sufrir una reducción del salario de agosto del 2,5%, cifra que se debe dividir en tres cuotas.
Por lo tanto, para los docentes que hicieron una sola jornada de protesta, el descuento será casi insignificante. Mientras que aquellos docentes que se plegaron a las dos jornadas de protesta y no concurrieron a las escuelas, deberían recibir un descuento del 10% de su salario en agosto.
Aunque por la decisión del Gobierno de aplicar el 50% del descuento, y en tres cuotas, el impacto del descuento será un poco mayor para los que protestaron una jornada, pero tampoco será significativo. Hay que recordar que, según el acuerdo paritario firmado, en agosto, los docentes cobrarán el total de la inflación de julio en Córdoba (4,3%), más una suma fija de 40 mil pesos, no remunerativo.
También hay una actualización del Fonid, que pasa de 37 mil pesos a 45 mil pesos, para los docentes que tienen hasta 22 horas semanales.
Por su parte, el 52% de los jubilados docentes que cobran un haber menor a los 740 mil pesos, cobrarán como aumento el total de la inflación el mes próximo, con 30 días de diferimiento, y no de dos meses, como lo era hasta julio pasado.