Otra revuelta en el Complejo Esperanza dejó siete heridos

Es la quinta en menos de un mes; desde ATE denunciaron “falta de políticas”

Otra revuelta en el Complejo Esperanza dejó siete heridos

Siete empleados del Complejo Esperanza, espacio que aloja a menores en conflicto con la ley penal, resultaron heridos el miércoles en lo que fue la quinta revuelta de jóvenes en menos de un mes. Desde la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) denunciaron la “prisionización” del trato de los menores, la “inoperancia de las autoridades”, la “falta de políticas claras” y la escasez de personal.

“Entre 11 y 12 jóvenes del sector tres ganan la puerta a unos de los trabajadores, a uno de mis compañeros, los mal llamados guardias. No sólo le ganan la puerta y salen, sino que a medida que van saliendo le van pegando con los palos”, contó el delegado Sergio Piedra. Y agregó: “Ganan los pasillos e increpan a los demás compañeros que estaban ahí, que no son muchos, que puede ser uno, también lo golpean, lo tiran al suelo. Y van al sector dos donde ahí se encuentran unos 10 jóvenes también”.

“Cuando llegan al sector dos, se encuentran con dos compañeros que estaban en el sector uno y el sector dos, y los golpean también”, agregó en declaraciones a Mitre Córdoba. Finalmente, la revuelta fue controlada, luego de que los encargados del control de las cámaras advirtieran sobre la situación.

Sobre las causas que desencadenaron el quinto conflicto de este tipo en menos de un mes, el delegado de ATE Juan Carlos Cabanillas, en diálogo con HOY DÍA CÓRDOBA, aseguró que se debió a que los jóvenes de un sector mantenían una enemistad con los de otro y los buscaban para pelear. Al respecto, el delegado apuntó contra “la falta de políticas claras” por parte de las autoridades del Complejo Esperanza para prevenir este tipo de situaciones. “Ellos, los asesores del ministerio y demás, son altos mandatarios del servicio penitenciario y creen que tratar con los chicos es como en una cárcel y no, no es como una cárcel (…) no hay una política clara en cuanto a qué hacer con los jóvenes.

Por otra parte, Cabanillas aseguró que desde la primera revuelta hasta el día de hoy “no se modificó nada”. “Sí hubo un intento de prometernos a los trabajadores adicionales para sobre exigir el servicio, para que hagamos más horas de trabajo. Pero bueno, el personal en general no somos, digamos, tontos porque encima prometían una jornada laboral pagando la mitad del sueldo, entonces es imposible”, explicó.

“Nosotros venimos reclamando mejoras y situaciones para controlar y no somos ni respetados ni escuchados”, denunció. Y remató: “Este problema va a seguir existiendo hasta que no se intervenga el complejo”.

Salir de la versión móvil