Se espera que la defensa del imputado, que asesinó de 18 puñaladas a la trabajadora sexual el 17 de octubre de 2017, aproveche estos testimonios para fundamentar que Casiva es inimputable, tal como se dictaminó en la primera pericia. Sin embargo, el fiscal Guillermo González pidió una segunda opinión y determinó que podía ser juzgado.
En las dos primeras jornadas de testimonios, los familiares del acusado reconocieron la existencia de denuncias por violencia de género. Cabe destacar que se trata del primer proceso en el que se enjuicia el asesinato de una joven trans bajo la carátula de femicidio.