Luego de diez días de focos activos, los incendios forestales siguen golpeando a nuestra provincia y aunque todavía no hay datos precisos del monitoreo que se realiza, se estima que las pérdidas podrían superar las que se registraron en los peores años recientes. En diálogo con HOY DÍA CÓRDOBA, Diego Pons, doctor del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), analizó el cuadro de situación actual y alertó sobre el impacto en el ecosistema.
Hay estimaciones, pero a groso modo porque no tenemos una imagen limpia en donde no tengamos el efecto de nubes ni humo mezclados. Debemos tener despejada la zona evaluada a través del satélite”, explicó el especialista, quien agregó: Hemos hecho evaluaciones parciales sobre focos de calor o imágenes en las que se puede hacer un análisis digital, pero hechas a mano”.
Pons explicó que mañana se llevará adelante una reunión entre las partes involucradas en este proceso para saber con qué elementos cuentan y seguir ampliando el análisis de las zonas afectadas, aunque explicó que en los incendios del mes de agosto se perdieron entre 45.000 y 50.000 hectáreas, y por lo que se viene evaluando ahora se habría afectado una superficie similar. Indicó, además, que estos números podrían superarse ya que el fuego continúa”.
El especialista aseguró que problemas endémicos como la calidad del agua y los procesos de erosión se van a acentuar”
Pons precisó que las áreas más afectadas comprenden las cercanías de Carlos Paz hasta San Clemente y desde el este de La Cumbre hasta Cruz del Eje, pero se trata de un cuadro relativo porque continúan con las evaluaciones para tener una imagen más clara de la tragedia ambiental.
El doctor Pons se refirió también al impacto que sufrirá el ecosistema como consecuencia del fuego, desde la regulación de la cuenca hídrica que impactará en el corto plazo cuando empiecen las lluvias, a los efectos en la calidad del agua y el proceso de erosión, problemas que se van a acentuar”, enfatizó.
Ni hablar de los efectos que tendrá sobre la gente que vive en las zonas, ya que no hay que olvidar que existen muchos productores en esas zonas quemadas y que pierden la posibilidad de recuperarse a futuro”, amplió. También por este motivo se trabaja conjuntamente con el gobierno provincial y otros actores para continuar determinando los alcances del fuego y los efectos que produce.
Arroyos secos
Uno de los efectos que podrían tener los terribles incendios de las sierras se observaría recién el año próximo, cuando llegue la temporada seca. Un estudio realizado por investigadores del Conicet y de la UNC indicó que el fuego en la cuenca podría agravar aún más la sequía que tradicionalmente ocurre en esa época, cuando los caudales de los ríos y de los arroyos que proveen de agua potable a la población están más bajos. Según el trabajo publicado en la revista científica Journal of Hydrology, las zonas quemadas de las cuencas cordobesas podrían captar hasta un 48% menos de agua. Y si ese año las lluvias demoran en llegar, es probable que las localidades que toman agua de esa cuenca se queden sin ella”, aseguró Ana Cingolani, una de las autoras del trabajo.
Marcha ciudadana
La ciudadanía comienza a movilizarse ante la recurrencia de los incendios que ya consumieron más de 70.000 hectáreas en la provincia, y que continúan sin ser sofocados a pesar del esfuerzo de bomberos y habitantes de las zonas afectadas. La agrupación Ambiente en Lucha, en efecto, convocó a todos los cordobeses y cordobesas a concentrarse mañana a las 11 en la esquina de avenida Vélez Sarsfield y bulevar San Juan, frente a la plazoleta Agustín Tosco, para exigir al gobierno provincial una solución. A la incalculable pérdida de flora y fauna, se suman decenas de casas. El Gobierno de (Juan) Schiaretti es el responsable de que esta catástrofe se repita todos los años”, indicaron desde Ambiente en Lucha.