Mientras sigue vigente hasta el 2 de mayo próximo la conciliación obligatoria en el conflicto con los docentes, y luego de los incidentes registrados el viernes pasado en in mediaciones del Centro Cívico de nuestra ciudad durante otra movilización del Sindicato de Empleados Públicos (SEP), las autoridades del gobierno provincial preparan la presentación de una nueva oferta salarial dirigida a la totalidad de los gremios estatales.
La intención de la gestión de Juan Schiaretti es cerrar un acuerdo paritario antes del inicio formal de la campaña electoral, previsto para la primera semana de mayo, como consecuencia de que la continuidad de los reclamos sindicales afectarán las aspiraciones del candidato oficialista a la Gobernación, el intendente Martín Llaryora.
Según trascendió, Schiaretti jugará sus últimas cartas en los próximos días para terminar con esta negociación. El rechazo del gremio docente (UEPC) a la tercera oferta que hizo la Provincia generó preocupación en el Gobierno, pero también en Llaryora, que se involucró personalmente en las tratativas. Aunque nadie lo confirmó, el postulante de Hacemos por Córdoba se habría reunido con Juan Monserrat, titular de la UEPC, reveló ayer el periodista del diario La Voz del Interior, Julián Cañas.
El anuncio del Centro Cívico de la suspensión del diferimiento del cobro de los aumentos que perciben los activos por parte de los pasivos, fue un pedido expreso del candidato oficialista. Ahora viene otra “sugerencia” que Llaryora hizo 10 días atrás, en declaraciones realizadas en Río Cuarto. “Hay que mejorar la oferta salarial a los docentes”, dijo el aspirante a suceder a Schiaretti.
Los negociadores del Gobernador, la ministra de Coordinación, Silvina Rivero; el ministro de Educación, Walter Grahovac, y el secretario General de la Gobernación, Julio Comello, no tuvieron descanso durante el fin de semana pasado.
El sábado por la mañana hubo reuniones reservadas con la cúpula del gremio docente, tratando de encontrar un camino para mejorar la oferta porcentual (un 40%, dividido en cuatro cuotas hasta junio) que fue rechazado, con el alivio que significó para el gremio docente la suspensión del diferimiento para los jubilados.
La UEPC se adjudica gran parte de esa conquista, porque fue el único gremio que venía reclamando esta medida desde hace años. Aunque es provisoria, hasta el 31 de diciembre. Una cuestión de fondo que deberá resolver el próximo gobernador.
Hay mucho hermetismo en las negociaciones, pero una de las salidas sería que la Provincia adelante el pago de las cuotas. La oferta rechazada estipula un aumento del 10% para febrero (ya se pagó); otro 10% que se abonará en el próximo salario de marzo; 10% en mayo y 10% en junio.
Una alternativa sería adelantar una cuota para abril, y la última en mayo. Eso significaría un aumento del 40% en cuatro meses. La otra alternativa es un aumento de los porcentajes, que es lo que reclaman las bases de los gremios.
Dos puntos a tener en cuenta en esta negociación: el período que se discute es febrero-julio y la inflación que rige es la que mide la Dirección de Estadísticas y Censos local. En Córdoba, en febrero fue 7,54% y en marzo el 7,99%. Es decir, que la inflación acumulada en los primeros dos meses del período paritario fue del 15,53%.
Los funcionarios schiarettistas argumentan que esa suba es compensada con el 20% de aumento de febrero y marzo. Los gremios miran más adelante y no los convence el 40% propuesto hasta julio.
En las últimas horas se sumó una buena noticia para el Centro Cívico: el Sindicato de Empleados Públicos (SEP) que había decidido no cerrar un acuerdo hasta que lo hagan los docentes, cambió de postura. El gremio que conduce José “Pepe” Pihen se sentará a negociar desde hoy y es muy probable que firme esta semana. En el SEP hay elecciones el 28 de abril y el oficialismo quiere llegar a las urnas con el acuerdo firmado.
Los docentes podrían llegar a un acuerdo también antes del final de la conciliación, pero hay un interrogante que atraviesa a los gremios, pero sobre todo al gobierno provincial y a su candidato a gobernador: que pasará con los autoconvocados docentes y en salud. El temor es que sigan reclamando durante la campaña electoral, que el PJ quiere afrontar con las menores tensiones posibles.