Durante el 2021, un agujero de ozono se ha abierto sobre la Antártida, el cual alcanzó una extensión máxima de 24.8 millones de kilómetros cuadrados. En este marco, científicos de la NASA y de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica aseguran que las bajas temperaturas acrecentaron este fenómeno.
Según un comunicado de prensa del Observatorio de la Tierra de la NASA, el agujero es el decimotercero más grande desde 1979; podría cerrarse a finales de noviembre. En un video, la NASA mostró la inmensidad del agujero sobre el Polo Sur entre el 1 de enero y el 7 de octubre de 2021. “Las temperaturas más frías que la media y los fuertes vientos en la estratosfera que rodean la Antártida contribuyeron a su tamaño”, explicaron los expertos.
¿Qué es un agujero de ozono?
Un “agujero de ozono” es un adelgazamiento de la capa de ozono en la estratosfera sobre la Antártida que se produce cada septiembre. Formas químicamente activas de cloro y bromo se liberan en la estratosfera durante las reacciones en las nubes polares de gran altitud.
“Se trata de un gran agujero de ozono debido a las condiciones estratosféricas de 2021, más frías que la media, y sin el Protocolo de Montreal habría sido mucho mayor”, dijo Paul Newman, científico jefe de ciencias de la Tierra en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.
Para evitar que los agujeros crezcan con los años, existe algo llamado “El Protocolo de Montreal”, hecho en 1987, el cual restringe las sustancias que agotan la capa de ozono, pero sólo 50 naciones lo han firmado; cuando hizo el acuerdo, los científicos pronosticaron que la capa de ozono se recuperaría en 2060 si más naciones se adherían, lo cual no ha sucedido.
La recuperación está siendo más lenta de lo previsto y el consenso ahora parece ser que no será antes de 2070 debido a la actividad humana y el cambio climático.