Nuestra colección de buenos momentos

Porota

Nuestra colección de buenos momentos

Desde El Club de la Porota decidimos consultarle a los miembros de nuestro equipo qué hacen para compartir y atravesar este momento. Te invitamos a leer cada experiencia para que te identifiques en ellas o pienses en las que generaste vos, sea virtual o presencial. Lo que sea que estos retazos de nuestra cotidianeidad te generen, está bien. El objetivo es sentirnos cerca y cuidados, más allá de todo, formamos parte de una comunidad que sale adelante con simpleza, creatividad y una gran capacidad de resiliencia.

Hacer maicenitas una tarde fría de domingo, con una receta de las tantas que hay en Instagram, sin saber cuántas te pueden salir con medio kilo de fécula. Y terminar todos alrededor de la mesa pegando docenas de tapitas con dulce de leche y bordeándolas con coco rallado. Memorable. Blanca, prensa.

Vivo con mi hija y mi compañero. La terraza de mi casa es mi refugio, busco la luz que reciben esas plantas mientras me tomo un momento para estar a solas y reflexionar. Mi propio jardín secreto en el hogar”. Valentina, producción general.

Siempre antes de empezar a ver una película o serie les digo: ´suerte´ (como una acción de hacer algo tan lindo y desconocido) a quienes tengo al lado. Ya se tornó una costumbre, y ahora mis hijos ya me lo dicen antes que yo lo diga”. Mariano, producciones audiovisuales.
n Una de las actividades que más nos gusta hacer y disfrutar es cocinar, y por supuesto, participamos todos. Buscamos recetas que tengamos muchas ganas de comer y que sea fácil de elaborar para que los niños participen. Por ejemplo, hacer flan casero, tortas, panqueques con dulce de leche o un rico guiso de lentejas”. Lucía, Coordinadora de redes sociales.

Por las tardes vemos alguna película del Lejano Oeste que den en el cable. ‘Sentate, Isabel, que te va a alcanzar un balazo’, le digo a mi esposa mientras esperamos que todo pase”. Cabrito, amigo de la casa. 

Mi nieta de 7 y yo de 62 vivimos solas en Resistencia, Chaco. Cuando cae la noche, antes del baño, ponemos música infantil y bailamos para que ella pueda realizar alguna actividad física. ¡La pasamos genial!”. Mariana, voluntaria de Voces Mayores.

Salgo a caminar sola varias veces a la semana. No solo camino sino que también observo todo lo que me rodea. Personas, clima, vegetación, pájaros… ¡Me llena de vida! En el camino dejo todo lo que no quiero que entre a casa. Vuelvo feliz y fortalecida. ¡Qué lindo es vivir!” Stellita, voluntaria de Voces Mayores.

Cuando bordo, todo mí ser se transporta a otra dimensión. Es placer, alegría, creatividad y conexión conmigo misma”. Jose, voluntaria de Voces Mayores.

Todas las mañanas , después de desayunar, pongo la música fuerte y bailo hasta cansarme. Después, un poco de bicicleta fija, y a veces, canto. ¡Antes no lo hacía! Quisiera agradecer a mi amiga Nancy por la compañía diaria por teléfono. Durante la pandemia nos acompañamos y hablamos por horas”. Ani,voluntaria de Voces Mayores.

Mi mesa de trabajo está ubicada frente a una ventana a mi jardín. Sobre ella: la compu, el celu y la ventanita que me comunica con Alicia, una vieja querida con la que comparto charlas, ejercicios, estimulación, risas. Son momentos felices en medio de esta pandemia que no nos permite estar juntas. Pero lo disfrutamos igual”. Carmen,voluntaria de Voces Mayores.

Mi amiga Caru Mora anoche me envió esta canción colectiva interpretada por artistas latinoamericanos en cuarentena. Se llama ´Chabuca Limeña´. Me dormí escuchándola. Recomiendo el libro ´La Rueda de la Vida´de Elizabeth Kubler -Ross. Nos enseña a descreer los fantasmas de la muerte y abrazar el poder del amor incondicional. Desde enero de 2021… aprendiendo a vivir sola”. Susy. Tamborera de Fuerza Mayor, voluntaria de

Voces Mayores

¡Hola a todos! Tengo una peli para recomendar por Netflix: Milagro azul. Excelente para ver en familia”. Graciela, voluntaria de Voces Mayores.

Quiero recomendarles el libro ´La mujer sin nombre´de Vanesa Montfort. Un excelente libro”. Ester, voluntaria de Voces Mayores.

Me gusta hacer talleres virtuales. Cuando terminan me siento triste porque no tengo qué hacer. Me levanto contenta. Hago las tareas de la casa y busco información para estar activa y luego conectarme con mis talleres. Hacerlos me saca de la tristeza. Mi familia me ayuda con la tecnología y cuando estamos en clases y no sabemos algo, las profes nos ayudan también”. Betty, voluntaria de Voces Mayores.
n Les recomiendo la serie ´Ten per cent´ en Netflix. Es amena y alegre. También les recomiendo un libro que me gustó mucho. Se llama ´Mamá´de Jorge Fernández Díaz”. Marité, voluntaria de Voces Mayores.

Doy gracias a Dios por estar aún con mi esposo, transitando está pandemia, que nos aleja de nuestros amigos y familia pero que nos mantiene unidos. ¡Ya vamos por los 48 años de casados!”. Clara, voluntaria de Voces Mayores.

Cuando salgo a caminar junto hojas para secar dentro de los libros. Los colores son hermosos y se conservan. Las del Liquidámbar en especial”. María, voluntaria de Voces Mayores.

Vivo sola. Soy viuda. Hice y hago bastante en esta etapa de pandemia. Quedarme en casa me permitió hacerle mejoras. También me dediqué a tejer bufandas, boinas, gorros, chalecos, adornos a través de tutoriales de YouTube. ¡Tejí y cosí, muuuuchos barbijos!”. Olga, voluntaria de Voces Mayores.

Hoy este nuevo amanecer nos regala un día hermoso. Un punto de partida para reflexionar a la medida que podamos. Cada día es un reto ser amable con uno mismo y con los demás. Transitar la vida con alegría”. Sarita, voluntaria de Voces Mayores.

Cuida de mis ojos. Cuida de mi cara. Abre los caminos. Dame las palabras. No maltrates nunca mi fragilidad. Soy la fortaleza de mañana. Cuida de mis sueños. Cuida de mi vida. Cuida a quien te quiere. Cuida a quien te cuida. No maltrates nunca a mi fragilidad. Yo seré el abrazo que te alivia” Luis, voluntario de Voces Mayores nos regala este fragmento de la canción Cuidame” de Pedro Guerra.

Vivo sola, lo que no significa que esté sola, porque cada día encuentro en mí mundo de papel, música, redes la energía que me hace seguir resistiendo”. Patricia, voluntaria de Voces Mayores.

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