La crisis que está produciendo la propagación del coronavirus y el aislamiento obligatorio dictado para frenar la velocidad de esa extensión obliga a las economías de todo el mundo a replantearse sus ideales y prioridades. Con el fin de que la debacle no empeore la situación de los sectores más vulnerables, hasta los países más liberales comienzan analizar la implementación de medidas más tendientes al modelo keynesiano.
En este sentido, el Financial Times publicó un editorial en la que sugirió que los Estados pongan en marcha un papel más activo en la economía para ayudar a aquellos en los que reposa la mayor carga de los esfuerzos nacionales. Entre las medidas recomendadas por el periódico británico para paliar los efectos producidos por el Covid-19 se destaca el aumento del gasto público. Los gobiernos deben ver los servicios públicos como inversiones en lugar de pasivos, y buscar formas de hacer que los mercados laborales sean menos inseguros. La redistribución volverá a estar en la agenda; los privilegios de los ancianos y ricos en cuestión”, remarca la nota publicada a principios de mes. Y señala que las políticas hasta hace poco consideradas excéntricas, como los impuestos básicos sobre la renta y la riqueza, tendrán que estar en la mezcla” de políticas a implementar.
Además, en este quiebre ideológico que muestra el medio especializado, que siempre defendió los modelos económicos más liberales, indicó que como los líderes occidentales aprendieron en la Gran Depresión, y después de la segunda guerra mundial, para exigir sacrificios colectivos debes ofrecer un contrato social que beneficie a todos”. De la misma manera que la lucha por contener la pandemia ha puesto de manifiesto la falta de preparación de los sistemas de salud, la fragilidad de las economías de muchos países ha quedado expuesta”, sostuvo el editorial.