San Juan tembló con violencia exactamente a las 23:46:20 del lunes, a una profundidad de 10 kilómetros, a 57 kilómetros al sudoeste de su capital en la localidad de Villa Media Agua, del departamento Sarmiento. Un sismo que abrió grietas en la Ruta Nacional 40 a lo largo de 4 kilómetros, en la zona de Carpintería, y que con sus bruscas oscilaciones vació las estanterías de los supermecados, generó olas en las piletas de natación e hizo pendular lámparas. Fueron segundos caóticos donde sonaban alarmas de autos y casas, los perros ladraban inquietos, mientras los habitantes buscaban lugares seguros donde refugiarse.
Sin muertos ni heridos graves, se reportaron cinco heridos leves, 19 familias evacuadas y daños en casas particulares. El terremoto tuvo más de 50 réplicas durante la jornada de ayer y esperan que puedan producirse durante los próximos seis meses. Fue tal la magnitud, que el cimbronazo fue percibido en varias provincias como Mendoza, donde hubo 12 derrumbes menores, además de Córdoba, La Rioja, Catamarca, Entre Ríos, San Luis y Buenos Aires, e incluso en varias localidades de Chile, sin daños ni lesionados.
El gobernador de la provincia, Sergio Uñac, confirmó que el sismo no produjo daños personales de consideración” y que se destinarán 100 millones de pesos para la reconstrucción de las casas particulares. Uñac aseveró que no tuvieron que lamentarse víctimas fatales gracias a la decisión que se ha tomado durante varias décadas en la provincia de San Juan con el código edilicio, que es bastante estricto y que tiene mayores costos que la construcción de cualquier otra ciudad o provincia del país, pero que para una zona naturalmente sísmica tiene estos resultados”. En tanto, el secretario de seguridad de San Juan, Carlos Munisaga, aseguró que el temblor sólo ha ocasionado daños en la habitabilidad” de unas 15 o 20 viviendas precarias por departamento”, quien resaltó el buen funcionamiento del sistema de prevención sísmica y la educación sísmica en la provincia”.
El Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres) informó que la intensidad del temblor, que mide cómo se percibió y los daños que provocó, fue estimada en grado VI a VII en zonas de Sarmiento, Pocito y Calingasta, y de V a VI en plena Ciudad. Además, confirmó que este terremoto fue el peor que se vivió desde el histórico sismo ocurrido el 23 de noviembre 1977 en Caucete, donde San Juan fue castigada por la naturaleza con un terremoto de magnitud 7,4 en la escala de Richter con epicentro en el extremo sudoeste de la sierra de Pie de Palo, con una profundidad de 25 kilómetros, que ocasionó 65 víctimas fatales y más de 300 heridos.
Por su parte, el investigador principal del Conicet y doctor en ciencias Geológicas Juan Pablo Milana dijo que desde 1977 no se sentía en la provincia de San Juan un temblor del tenor” del registrado anoche, que subjetivamente” se sintió menos que otros de nivel similar en la escala de Richter, y que si este sismo ocurría en Buenos Aires, tiraba la mitad de los edificios”. Además afirmó que Hoy en día, San Juan debe ser una de las ciudades más seguras del mundo en materia de terremotos, porque tras ser golpeada se generaron las condiciones de seguridad necesarias”.
Recomendaciones
El Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (Sinagir) emitió una serie de recomendaciones de acción ante la eventualidad de una actividad sísmica como la ocurrida ayer. En caso de temblores de ese tipo, es importante mantener la calma y ubicarse en lugares de protección sísmica. Es decir, debajo de un elemento firme y, si ello no fuera posible, junto al mismo”.
También agregaron que hay que cortar la energía eléctrica, cerrar las llaves de paso de agua y gas, iluminarse con linternas y evitar el uso de velas, fósforos o encendedores ante eventuales fugas de gas”. Además, recomendaron alejarse de objetos que puedan caerse, deslizarse o quebrarse como vidrios, espejos o muebles” y mantenerse alejado de edificios, postes y cables eléctricos.
Susto en Córdoba
El sismo se sintió con intensidad en la provincia de Córdoba, donde no se reportaron daños, ni personas lesionadas, informaron ayer fuentes oficiales. En la capital, los vecinos que viven en edificios altos salieron a la vía pública por temor a posibles inconvenientes. También los turistas que veranean en las sierras sintieron el temblor y replicaron en redes sociales los acontecimientos y movimientos de diferentes objetos que graficaron la situación.
El último antecedente sísmico con características similares ocurrió en septiembre de 2015. Considerado el más potente en Córdoba desde 2011, fue un terremoto de 5,8 con epicentro en las Salinas Grandes y a 53 kilómetros de profundidad, aunque en esa ocasión las réplicas siguieron varios días.