Bolsonaro salva al paraguayo Abdo Benítez del juicio político

Bolsonaro salva al paraguayo Abdo Benítez del juicio político

ASUNCIÓN.- Cuando parecía que el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, se encaminaba al juicio político por firmar en secreto un pacto energético con Brasil, la intervención a último momento de Jair Bolsonaro parece haberlo salvado. El mandatario ultraderechista ordenó la anulación del convenio sellado para la distribución de la energía eléctrica producida por la planta binacional Itaipú, considerado altamente perjudicial para Paraguay, y evitó el avance del proceso de destitución contra Abdo Benítez que se encaminaba a iniciar el Parlamento.

La oposición tenía arrinconado al presidente paraguayo, que iba a enfrentar un proceso de juicio político con derrota segura gracias a una inédita unidad de sus rivales que aseguraba los votos necesarios para aprobar su destitución. Sin embargo, el presidente brasileño ordenó a su embajador en Asunción, Carlos Simas Magalhaes, que firme la anulación del acta de la discordia, de-sactivando el proceso parlamentario.

El movimiento Honor Colorado, liderado por el ex presidente Horacio Cartes, retiró en efecto su apoyo al juicio luego de que ambos gobiernos firmaran el documento que, entre otros ítems, establece que las partes excluyen la posibilidad de vender el excedente de energía eléctrica paraguaya al sector privado brasileño, como disponía el acuerdo entre Eletrobrás a Itaipú.

Por este pacto, Paraguay iba a dejar de percibir más de 200.000.000 de dólares, sangría que sería transferida a los usuarios comunes de luz. Un medio de prensa paraguayo, ABC, aumentó aún más el escándalo al publicar, en base a documentos, mensajes y audios propios, que la cláusula suprimida estaba dirigida a beneficiar a una compañía eléctrica ligada a Bolsonaro.

La hipótesis explica la rápida reacción del mandatario brasileño, que ya en la noche del miércoles anunció que estaba dispuesto “a hacer justicia en esta cuestión de Itaipú” para ayudar a su colega en apuros. “Estamos resolviendo este asunto. Puedo asegurar que Marito (como se llama a Abdo Benítez) será reconocido por el buen trabajo que está haciendo en Paraguay”, aseguró Bolsonaro, que a las pocas horas desactivó la bomba de tiempo que se avecinaba sobre ambas gestiones.

Amnistía encubierta

BRASILIA.- El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a sacudir ayer el escenario político de su país al cambiar por decreto la Comisión Especial sobre Muertos y Desaparecidos Políticos (Cemdp) durante la dictadura militar (1964-1985) porque, argumentó, “ahora el Gobierno es de derechas”. La medida cambia a cuatro de los siete miembros del organismo, modificando la relación de fuerzas en la Cemdp, que pasará a ser dominada por el oficialismo.

Se produce además en medio de una enorme polémica después de que el mandatario ultraderechista defendiera los crímenes cometidos por el régimen militar y cuestionara el trabajo de la anterior Comisión de la Verdad que investigó las violaciones a los derechos humanos de ese periodo. “El motivo es que cambió el presidente; ahora es Jair Bolsonaro, de derechas. Punto final”, argumentó. 

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