El oficialismo prepara sus espadas para abrir finalmente, la semana que viene, el debate del nuevo proyecto de la Ley ómnibus en Diputados. Mientras la Casa Rosada avanza en las negociaciones con los gobernadores, el bloque de La Libertad Avanza (LLA) ya inició los encuentros con los miembros que conforman la Comisión de Presupuesto y Hacienda para convenir una estrategia conjunta en defensa del proyecto, que se espera llegue en las próximas horas al Congreso.
Si bien la Casa Rosada intentaba dar ayer las últimas puntadas con los gobernadores al paquete fiscal que acordó con la oposición dialoguista -y que tratará en paralelo a la Ley ómnibus-, lo cierto es que cada día aparecen nuevos contratiempos y trabas de diputados y mandatarios “aliados”, que tienen sus reclamos, que van desde la regulación de las tabacaleras a los incisos sobre la promoción de inversiones, Ganancias y la reforma laboral.
Por eso mismo, el ministro del Interior, Guillermo Francos, les bajó un mensaje claro ayer a los gobernadores de la Región Centro (Rogelio Frigerio -Entre Ríos-, Maximiliano Pullaro -Santa Fe- y Martín Llaryora Córdoba-), con quienes se reunió de manera desdoblada en las ciudades de Paraná y Santa Fe: “No esperen nada del Estado, por ahora no hay plata”. “Ya va a haber porque estamos estabilizando la situación económica macro y estamos convencidos de que a partir del segundo semestre del año la economía, con la estabilidad, va a rebotar y podremos comenzar a conversar de otro tipo de cosas”, afirmó el enviado de Milei.
Si bien los mandatarios ratificaron su respaldo a la ley y al Pacto de Mayo, los tres gobernadores marcaron sus reparos: los aportes a las cajas de jubilaciones que no fueron transferidas al Anses -que se redujeron a cero con Milei-, los subsidios al transporte y la necesidad de un proyecto productivo para el país, entre los centrales.
Más temprano, Francos recibió al gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, quien le manifestó su “preocupación por la caída de la producción de YPF y el abandono de los yacimientos”. Además, “le reiteró el pedido de mayor inversión y la negativa de toda la cuenca a cualquier forma de privatización de la unidad económica de Río Turbio”. “El aumento de los servicios públicos, decretado por la Nación, puso en jaque la vigencia de la tarifa para las zonas frías y los aumentos en el gas y la luz se hacen imposibles de costear para las familias santacruceñas”, agregó el gobernador sureño.
Así las cosas, la suerte de la norma sigue siendo una incógnita, al punto que las últimas versiones indicaban que el paquete fiscal que funciona como prenda de negociación con los mandatarios ni siquiera está cerrado y aún se encuentra en manos del ministro de Economía, Luis Caputo.
La UCR presiona por las tabacaleras
El radicalismo sumó en las últimas horas un reclamo que agrega presión al oficialismo para conseguir los votos necesarios para aprobar la Ley Bases. Ocurre que el centenario partido reclamó por la exclusión del capítulo tabacalero de la norma, que fue quitado de la nueva versión por presión de la Tabacalera Sarandí, que paga menos impuestos que sus competidores gracias a un amparo contra el tributo mínimo al cigarrillo. Los cambios originales proponían que todas las empresas del sector paguen los mismos impuestos.
“Principio de revelación: estimado @JMilei desde el bloque de la UCR vamos a reponer en el dictamen de Bases el art 189 y ulteriores, para que se terminen los privilegios en el mercado de los cigarrillos. El voto de su bloque revelará su compromiso con la reforma o su claudicación ante la billetera del lobby”, anticipó Martín Tetaz en X.