La Municipalidad de Córdoba comenzará esta semana a implementar controles de velocidad en las calles y avenidas de la ciudad con el sistema de “cinemómetros” o radares, que permiten medir y documentar la celeridad de autos y motos.
Tras un período de prueba de seis meses, el Palacio 6 de Julio se encuentra finiquitando los últimos detalles para poner en pleno funcionamiento el sistema en las próximas horas, según detalló a HOY DÍA CÓRDOBA el subsecretario de Tránsito municipal, Adrián Cena. “Aún no sabemos cuándo comenzará a funcionar con precisión porque seguimos haciendo pruebas de los distintos sistemas de medición y procesamiento de las infracciones, pero calculo que el miércoles ya estará andando”, adelantó el funcionario.
Cena aseveró también que, en base al largo período de prueba realizado de enero a junio pasado, las expectativas de un impacto positivo del sistema de multas en los hábitos de los conductores cordobeses son muy buenas. “Calculamos que al inicio será alto el porcentaje de infracciones, una cuestión que también dependerá de la presencia que podamos tener en las calles. Pero nuestro objetivo final es crear conciencia: que a medida que vaya funcionando el sistema vayan bajando las infracciones hasta llegar a cero. Para eso lo hacemos”, graficó el funcionario municipal.
Los límites de velocidades indican que, en general, se puede circular hasta 60 kilómetros por hora en las avenidas, aunque hay alrededor de 20 tramos de arterias donde sólo se puede manejar a 40 o a 50 kilómetros por hora. A su vez, en las calles que no son avenidas la máxima es siempre de 40 kilómetros por hora. La Municipalidad ha colocado carteles con las máximas permitidas, que sirven de guía para aquel conductor que no quiera incurrir en una infracción.
Respecto de cómo se usarán los radares, el municipio ya anticipó que se tratará de operativos móviles, por lo que podrán ubicarse en cualquier punto dentro del ejido urbano, las 24 horas del día. Los inspectores también los utilizarán durante la noche, con un proceso de calibrado especial. Los controles serán indicados por cartelería a 100 metros de su ubicación. La multa va de cinco a 30 de unidades UEM, establecida en 387,52 pesos, por lo que la sanción irá de 1.937,60 pesos a 11.625,60 pesos. En caso de reincidencia, el juez podrá disponer, además, la inhabilitación para conducir por un plazo de hasta un año.