Bruce Willis sorprendió a sus fans este miércoles con su inesperado retiro de la actuación, luego de que su familia anunciara que fue diagnosticado con afasia.
Aunque los síntomas de esta enfermedad son variados, en términos generales es un trastorno cognitivo que impide a una persona comprender correctamente el lenguaje. Quienes la sufren pueden tener dificultad para hablar, escribir o leer.
En este marco, Willis, de 67 años, famoso por filmes como «Duro de Matar» y quien ha participado en decenas de películas desde la década de 1980, no hizo públicas las razones de su afasia. Fue en un comunicado cuando su familia se limitó a decir que sus «habilidades cognitivas» estaban afectadas.
«Este es un momento realmente desafiante para nuestra familia y estamos muy agradecidos por su continuo amor», dice el parte de prensa de sus allegados.
¿Cómo se identifica esta enfermedad y cuáles son sus causas?
Los problemas del habla son los síntomas más comunes de la afasia, de acuerdo con la página web del Servicio Nacional de Salud de Inglaterra (NHS en inglés).
Los pacientes pueden cometer errores constantes en el uso de las palabras, como emitir sonidos incorrectos. Mientras conversan, además, podrían escoger palabras que al unirse no tienen sentido. Lo mismo podría ocurrir cuando redactan o interpretan el mensaje de otra persona.
Esta afección, que podría ocurrir junto a otros desórdenes como dificultad de visión, movilidad o memoria, no tiene un impacto en la inteligencia de quien la padece.
Por su parte, el NHS clasifica la enfermedad como «expresiva» o «receptiva». Esto dependerá de si un paciente tiene problemas para entender el lenguaje o expresarse.
Sin embargo, «la mayoría de las personas que tienen algún tipo de problemas del habla, tendrán dificultad para escribir, leer y quizás escuchar», dice la misma fuente.
Las causas
De acuerdo con la Clínica Mayo de Estados Unidos, la afección «suele presentarse de forma repentina» luego de un accidente cerebrovascular.
Esto supone un «bloqueo o ruptura de un vaso sanguíneo en el cerebro». Entonces, la «falta de suministro de sangre al cerebro produce la muerte de las células o daño en las regiones que controlan el lenguaje».
«En estos casos, la afasia generalmente ocurre con otros tipos de problemas cognitivos, como problemas de memoria o confusión», sostiene el centro de salud cuya sede central está en Minnesota.
No obstante, la afasia no es necesariamente permanente. Podría haber episodios temporales a consecuencia de migrañas, convulsiones o accidentes isquémicos.
Tratamiento
Luego de que la afasia es diagnosticada por un médico, el tratamiento común es la terapia de lenguaje. En este sentido, el NHS indica que este tratamiento podría ser individual o grupal, en persona o a través de un computador, pero siempre liderado por un terapeuta del habla.
«La terapia de la afasia tiene como objetivo mejorar la capacidad de la persona para comunicarse, ayudándola a usar las habilidades del lenguaje que le quedan, recuperar la capacidad para hablar lo más posible, y aprender otras formas de comunicación, tales como gestos, imágenes o el uso de dispositivos electrónicos», dice, por su parte, el Instituto Nacional para Sordos y otros Desórdenes de Comunicación de Estados Unidos.
Los resultados podrían variar de persona a persona. «La mayoría de las personas presenta algún grado de recuperación, y otras se recuperan por completo», establece el NHS.
Quienes han sufrido algún incidente cerebrovascular tienen mayor oportunidad de recuperarse frente a una persona con una enfermedad degenerativa progresiva, concluye la entidad.