Un estudio relevó los obstáculos formales e informales que obstruyen la participación política de las mujeres en condiciones de igualdad con los hombres. El relevamiento, coordinado por la magister en Comunicación Política Paola Zuban y el director de la Maestría en Comunicación Política de la Universidad Austral, Mario Riorda, fue realizado sobre 97 entrevistas a consultores políticos de Iberoamérica.
“Aunque las mujeres han librado muchas batallas en los campos de la política y del derecho, no ha sido suficiente. Persisten aún numerosos obstáculos formales e informales que obstruyen la participación política en condiciones de igualdad con los hombres”, explicaron los autores del estudio. Y agregaron: “Los partidos resisten a las militantes como candidatas, dirigentes o gobernantes y fomentan prácticas con impacto diferencial para mujeres y hombres”.
En el estudio, se sostiene que la situación de las mujeres en política es totalmente desventajosa. Como muestra de ello, se afirma que más del 60% de los consultores ha participado en una campaña electoral en la que la candidata es mujer en los últimos diez años, y su percepción de que la política es un ámbito tradicionalmente masculino es “muy alta”.
Ante la pregunta: “¿existen diferencias entre clientes varones y mujeres en relación a su actuación en la política?”, la mayor cantidad de respuestas (48,3%) afirman que, en la comparación entre varones y mujeres, los recursos económicos, la experiencia y trayectoria, los apoyos partidarios y el tiempo que le dedican a la actividad son los recursos más escasos para las mujeres.
Por otra parte, más del 80% opinó que la situación de las mujeres en el acceso a los recursos económicos, el acceso a espacios de poder y a la mesa de decisiones es peor para mujeres que para varones y más del 60% admitió que la consideración de sus propuestas y opiniones o proyectos, la distribución en el uso de la palabra también es desventajosa para ellas. En tanto, el 72,4% dijo que la disponibilidad de horarios para reuniones y actos políticos y la convocatoria a reuniones o encuentros en los que se deciden cuestiones importantes es peor para mujeres que para varones. La única excepción es la formación/capacitación de las mujeres.
“Estás loca”: la violencia de género y los estereotipos
En el estudio también se identificaron diferentes tipos de violencia política contra las mujeres. Una de las abordadas fueron las agresiones verbales: los comentarios sobre el estado emocional y mental (“estás nerviosa”, “estás loca”, “sos muy sensible”, “sos muy intensa”, 89,80%) responden al estereotipo femenino vinculado a una sensibilidad emocional especial atribuida a diferencias psicológicas producidas por cambios hormonales.
Las bromas hirientes basadas en el género, comentarios misóginos, ridiculizaciones y agresiones verbales (92,9%) son la expresión más inmediata y extendida de este estereotipo.
Delegarlas al papel de secretaria en las reuniones es la muestra más acabada del desprecio por la palabra de la mujer, una tarea de menor importancia que las “pone en su lugar”.