El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llegó ayer a España en la segunda y última escala de su gira europea destinada a relanzar relaciones, abogar por su plan de paz en Ucrania y avanzar en la aplicación del acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur.
Tras cinco días en Portugal, el mandatario brasileño llegó a la capital española en horas de la tarde y su primera actividad fue asistir a un foro empresarial. En tanto, hoy se reunirá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el rey Felipe VI.
En el encuentro con empresarios, Lula volvió a tocar el tema de Ucrania, que estuvo presente a lo largo de su gira europea. “No se puede admitir que un país invada y desestime la integridad territorial del otro, pero es una guerra en donde nadie habla de paz”, declaró.
“Si nadie quiere intentar resolver esta situación, ¿cómo llegará la paz? Si tanto el lado que ataca, como el lado que está siento atacado son reticentes, me pregunto: ¿quién negociará la paz?”, cuestionó.
Antes, en el cierre de su visita a Portugal, hizo una nueva condena a la invasión rusa de Ucrania durante un discurso en el Parlamento, que fue interrumpido por diputados de extrema derecha afines a Bolsonaro. Estos fueron reprendidos por el titular del Parlamento por “avergonzar el nombre de Portugal”, aunque el propio Lula desestimó luego la protesta.
Cabe mencionar que otro de los temas en la agenda de Lula en España serán las negociaciones por el acuerdo comercial UE-Mercosur, que se completaron en 2019, pero cuya ratificación se estancó en el bloque de 27 naciones europeas.
España asume la presidencia rotatoria de la UE en julio, mientras que Brasil asumirá simultáneamente el papel equivalente en el Mercosur, el bloque comercial que también integran Argentina, Paraguay y Uruguay. Ambas partes se han manifestado ansiosas por finalizar los aspectos pendientes.