El jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, pidió ayer apoyo desde Bielorrusia, donde se encuentra desde que salió de Rusia tras el levantamiento protagonizado por el grupo de mercenarios que encabeza, y aseguró que “habrá nuevas victorias en el frente” de batalla contra Ucrania.
“Hoy, más que nunca, es necesario que nos apoyen”, dijo Prigozhin en su primer mensaje de audio desde que abandonó el territorio ruso después de alcanzar un acuerdo con el presidente ruso, Vladimir Putin, en pleno aumento de la tensión.
En el mensaje difundido por un canal de Telegram afín al Grupo Wagner y recogido por el portal de noticias Meduza, Prigozhin agradeció a sus seguidores y señaló que lo que buscaron con la insurrección de hace unos 10 días era “acabar con los traidores y movilizar a la sociedad”, y que creía que lo habían logrado “en gran medida”.
En tanto, Ucrania dijo ayer que con la contraofensiva en una semana había recuperado 37 kilómetros cuadrados en el este, mientras que Rusia afirmó que frustró el intento de asesinato del gobernador de la península de Crimea.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, reconoció que los combates la semana pasada fueron “difíciles”, pero celebró “progresos” en la contraofensiva.
En el sur, “el territorio liberado ha aumentado en 28,4 kilómetros cuadrados”, lo que eleva a 158 kilómetros cuadrados la superficie total reconquistada en esta zona desde el lanzamiento de la contraofensiva, declaró la viceministra de Defensa ucraniana, Ganna Maliar.
Por su parte, los servicios de seguridad rusos (FSB) aseguraron hoy haber frustrado un atentado con bomba para asesinar al gobernador de Crimea, Serguei Aksionov.