Con estos dichos, el diputado brasileño pareció bajarle la tensión a la futura relación con el mandatario electo, Alberto Fernández, luego de varias críticas al líder del Frente de Todos y una polémica con su hijo, Estanislao Fernández.
«No precisamos morir de amor los unos por los otros para hacer negocios», aseguró Eduardo Bolsonaro, que preside la comisión de Asuntos Exteriores del país vecino.
Al hablar en una cumbre legislativa sobre política exterior en Brasilia, el diputado consideró que tras el cambio de gobierno en Argentina hay que «actuar pragmáticamente».
«No quiero saber cómo piensa Argentina, cómo piensa China. Nos preocupa hacer negocios», aseveró.
Según Eduardo Bolsonaro, la diferencia ideológica con el próximo presidente argentino no debería ser un obstáculo, pero aún no ha habido un primer contacto entre Fernández y su padre, que apoyó abiertamente la reelección del derrotado Mauricio Macri y que no asistirá a la juramentación de Fernández como nuevo presidente de Argentina.
Minimizó la aprobación por parte de la Comisión de Relaciones Exteriores de una moción de rechazo contra Fernández por apoyar la liberación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT).
Rechazó además el «alineamiento automático» que le atribuyeron los críticos de la política exterior del gobierno de Jair Bolsonaro en el acercamiento a Estados Unidos. Según él, Brasil inauguró un nuevo ciclo guiado por el pragmatismo y el fin de la ideología en la política exterior, sin atarse al dilema entre multilateralismo y bilateralismo, pero enfatizando su oposición al proteccionismo.
En tanto, Eduardo Bolsonaro había creado una polémica con Estanislao Fernández, al comparar una foto de ambos en las redes sociales.