RIAD.- El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó ayer a Arabia Saudita para una nueva gira por Medio Oriente en busca de una tregua en la ofensiva de Israel contra Hamás en la Franja de Gaza, con las partes inmersas en intensos combates y las negociaciones trabadas por exigencias difíciles de conciliar. En su quinta gira por Medio Oriente desde el inicio de la violencia, que se ha propagado por la región, el secretario de Estado Blinken fue recibido el príncipe heredero saudita Mohamed Bin Salman y por el príncipe y canciller Faisal bin Farhan al aterrizar en Riad, la capital de Arabia Saudita, primera escala de un viaje que se espera lo lleve también a Israel, Egipto y Qatar. El máximo diplomático estadounidense busca impulsar una propuesta presentada por Estados Unidos, Egipto y Qatar a Israel y Hamas de tregua en Gaza y liberación de los cerca de 130 rehenes que siguen en poder del grupo de los 240 secuestrados en territorio israelí en los ataques del 7 de octubre, que dejaron unos 1.200 muertos, en su mayoría civiles. En Gaza, en tanto, los combates se centran en la sureña Khan Yunis, la segunda mayor ciudad del territorio, donde según Israel se ocultan líderes de Hamás y que ha sufrido gran devastación en las últimas semanas. Por su parte, el primer ministro, Benjamin Netanyahu, volvió a rechazar las exigencias de Hamás de que Israel detenga de manera definitiva su ofensiva y se retire de Gaza, al reunirse con dirigentes de su partido Likud. Netanyahu reiteró que una victoria de Israel en Gaza asestaría un “golpe fatal” a los grupos aliados proiraníes que tiene en la región, como Hezbollah o los hutíes. “Hamás tiene exigencias que no aceptaremos”, dijo, y añadió que los términos de un eventual acuerdo “deben ser similares a los del acuerdo anterior”, que permitió la tregua en noviembre.