Tropas israelíes reconocieron ayer haber disparado contra una muchedumbre de personas que trataba de recoger alimentos de un convoy de camiones en la Franja de Gaza. En el incidente murieron al menos 112 personas y más de 700 resultaron heridas, según fuentes del Ministerio de Sanidad de Gaza, donde gobierna Hamas.
A su turno, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) denunció el uso, en la “atroz matanza”, de tanques y fuego de artillería por parte de las tropas de ocupación de Israel, según fuentes oficiales. El ejército israelí, por su parte, aseguró que “decenas” resultaron muertos o heridos por empujones, pisotones y atropellos de vehículos del convoy, aunque también afirmó que sus militares abrieron fuego cuando sintieron que estaban en peligro. En tanto, el Gobierno de Benjamín Netanyahu calificó lo ocurrido de “tragedia”.
El incidente tuvo lugar en el mismo día en que la cifra oficial de muertos en la Franja superó los 30.000 y los heridos los 70.000 desde que comenzó la guerra el pasado 7 de octubre, según fuentes sanitarias del enclave.
En la misma jornada, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo que más de 25.000 mujeres y niños palestinos murieron en la ofensiva militar israelí en la Franja. “Son más de 25.000”, dijo ante un comité de legisladores en Washington, que le pidió una cifra de mujeres y niños fallecidos durante la guerra, consignó la agencia de noticias AFP.
La cifra proporcionada por Austin está dentro del mismo rango de la información gazatí y se anunció mientras Washington presiona para lograr un alto el fuego y una reducción de las víctimas civiles en Gaza.