Quienes salen en bote hacia el barrio inundado de Mathias Velho, en Canoas, ubicado en el Estado Rio Grande do Sul, reciben advertencias de la población sobre posibles barreras establecidas por delincuentes cerca de las vías del tren. Antes de las inundaciones históricas, este barrio ya era considerado uno de los más peligrosos de la región metropolitana de Porto Alegre. Con las calles bajo agua y la falta de electricidad, la situación sigue igual. Debido a estas circunstancias, organismos de seguridad estatal y federal están monitoreando la actividad de facciones criminales durante las inundaciones.
La Policía Civil de Rio Grande do Sul comenzó a recibir información de que delincuentes estaban robando barcos, combustible y jetskis para transportar drogas desde las áreas inundadas, además de realizar robos en las casas abandonadas. Las sospechas se confirmaron cuando agentes incautaron 11 kilos de cocaína almacenados en una caja térmica en una zona inundada de Canoas, el pasado jueves.
“Ante esta información, llevamos a cabo una gran operación de patrullaje en bote en Mathias Velho”, dijo el jefe de la Policía Civil de RS, delegado Fernando Sodré. “En un principio, nos centramos en el rescate de las víctimas. Una vez que la situación se estabilizó, nos concentramos en el patrullaje para prevenir un aumento de la delincuencia y evitar la sensación de anomia social” añadió el delegado.
En la zona norte de Porto Alegre, la Policía Civil también descubrió lo que parece ser un “centro de almacenamiento” de objetos robados de las casas y comercios inundados. En el lugar, había electrónicos, electrodomésticos, perfumes y ropa. También se registraron dos saqueos (involucrando a muchas personas) en un supermercado y una fábrica de electrónicos, en Eldorado do Sul, municipio devastado por la inundación en la Región Metropolitana.
Ante el clima de inseguridad, la Policía Federal (PF) también asumió el rol importante. En un bloqueo en la carretera BR-116, en Eldorado do Sul, los agentes de la PF interceptaron una carga de 124 kilos de skunk (un tipo de marihuana potenciada) que estaba dentro de un auto. Esto representa el mayor cargamento de este tipo de droga confiscado en el estado, generalmente, las incautaciones de skunk rondan entre 10 y 20 kilos. Una semana antes de las inundaciones, la Policía Civil de RS había descubierto una casa utilizada como “depósito” para cargamentos de marihuana y cocaína, en Mathias Velho.
Desde el inicio del estado de calamidad pública, se han realizado 78 arrestos por delitos relacionados con las inundaciones, de los cuales 30 ocurrieron en refugios.