Pasada la primera vuelta de las elecciones presidenciales, Uruguay se encamina ahora a definir su futuro presidente en los comicios del 24 de noviembre. Para ello, tanto el oficialismo como la oposición ya comenzaron a prepararse para esta segunda vuelta electoral que deberá definir al ganador entre la fuerza política del candidato opositor Yamandú Orsi, quien obtuvo el 43,94% de los votos emitidos, y el oficialismo que lleva a Álvaro Delgado con 26,77% de los sufragios. El ballottage entre los dos candidatos más votados en primera vuelta será celebrado porque ninguna de las fuerzas logró reunir el 50 por ciento de las preferencias.
Con el 99,92% de los votos, Delgado corre con una ventaja. Tal como ocurrió con el actual presidente Luis Lacalle Pou, el Partido Nacional busca conformar una coalición de gobierno sumando al Partido Colorado, Cabildo Abierto, Partido Independiente y el nuevo Partido Constitucional Ambientalista. La suma de todas esas fuerzas en la elección del pasado domingo superó por 84.214 a la posición del Frente Amplio.
“Tenemos enorme responsabilidad de continuar con este rumbo. Con ajustes, con modificaciones, con hacer cosas que sean mejor de lo mismo. Pero darle a Uruguay un rumbo que nos permitió generar prosperidad y sortear juntos y salir juntos de los momentos más difíciles como las crisis”, aseguró Delgado sobre los resultados electorales.
El candidato del oficialismo comenzó a reunirse con los líderes de los restantes partidos de la coalición para trabajar en un plan de Gobierno único.
A pesar de la alianza de los partidos que adhieren al oficialismo podrían arrebatarle el triunfo, Orsi se mostró entusiasmado luego de este primer paso: “Vamos en estos 27 días por ese último esfuerzo con más ganas que nunca, más de pie que nunca, compañeras y compañeros”, dijo.
El senador por el Partido Nacional Sebastián Da Silva aseguró ayer que las elecciones mostraron electorados muy similares y que eso se verá reflejado nuevamente el próximo 24 de noviembre. En diálogo con la agencia EFE, enfatizó que allí el resultado será ajustado y que la coalición se impondrá por entre 20.000 y 30.000 votos.
Desde el Frente Amplio, el senador Daniel Caggiani celebró que su fuerza política haya obtenido mejores resultados que en 2019 al aumentar un 5% sus adhesiones e indico que la coalición de Gobierno las perdió respecto de esa vez. Sobre este punto, indicó que su fuerza política tendrá mayoría en la Cámara de Senadores y que también aumentó su representación en la Cámara de Diputados. “Desde el año 1999 de manera consecutiva el Frente Amplio se consolida como la primera fuerza política. Casi la mitad de la población le reconoce elección tras elección una representación bastante importante no solamente en materia parlamentaria, sino también en materia de legitimidad”, sostuvo.
Consultado, Caggiani puntualizó que en Uruguay “hay una expresión mayoritaria de cambio de Gobierno más que de continuidad” y dijo que el Frente Amplio deberá ir en busca de los votantes de los partidos de la coalición “que no ven a Delgado como un candidato fuerte para poder liderar los próximos cinco años de Uruguay”.
En las elecciones del domingo también se votaron en Uruguay dos plebiscitos, los cuales fracasaron por no lograr el 50% de la aprobación. En el caso del plebiscito para habilitar los allanamientos nocturnos, los datos mostraron que tuvo una adhesión de entre 39% y 41% de los votos sobre el total de emitidos. A su vez, el plebiscito de la reforma jubilatoria obtuvo entre el 36% y el 41% de los votos, según los datos de las encuestadoras.