En el marco del Mes de la Mujer, «Mujeres en eco» se presenta como un espacio dedicado a resaltar el impacto y legado de mujeres influyentes en diversas áreas. A través de entrevistas exclusivas, análisis de sus obras y un recorrido por sus trayectorias, presentamos a mujeres que están dejando su huella en la historia, la cultura y la sociedad. Desde artistas y escritoras hasta referentes en Derechos Humanos, cada nota busca visibilizar su contribución única y destacar el poder transformador que tienen en la actualidad. Les invitamos a acompañarnos en este homenaje, donde la inspiración, la resistencia y la creatividad femenina resuenan con fuerza.
En esta entrega, presentamos a Arde Mosaico, grupo interventor artístico de murales que, con perspectiva de género y de derechos humanos, fusiona arte y activismo en Córdoba. El grupo está integrado por mujeres que intervienen el espacio público con murales “en distintos formatos, pequeños, grandes y medianos”.
Arde Mosaico tuvo su primera primera intervención en marzo de 2023. El colectivo nació de la unión de artistas que ya formaban parte de otros espacios dedicados a las intervenciones urbanas, el muralismo y el mosaico. Su impulso surgió tras el Encuentro Nacional de Mujeres en octubre de 2022, donde se comenzó a hablar de un espacio plurinacional y disidente.
“Nuestras realidades personales pasaron a ser realmente políticas colectivas con Arde Mosaico, y de allí, las trazas hacia nuestras propuestas artísticas”, explican. Su objetivo principal es visibilizar las realidades locales, haciendo eco de situaciones cordobesas a través del arte.
El colectivo se organiza de manera orgánica, sin presiones y adaptándose a los tiempos que corren. “Nos abrazamos primero y después vemos qué podemos planificar, qué recursos (materiales, temporales, emocionales) tenemos y después decidir cómo o no avanzar en alguno de los proyectos”. Desde el inicio, evitaron institucionalizarse, prefiriendo articular con otros espacios militantes instituidos y dialogar propuestas en común.
El arte como herramienta de transformación
Para Arde Mosaico, el arte es un arma poderosa:
“Nos permite emocionar, concientizar, comunicar, abrir ojos y cabezas y lo hacemos de manera colectiva, a través de intervenciones artísticas urbanas e institucionales, como militantes de la vida y del arte”.
Mediante sus intervenciones, buscan defender todos los derechos humanos, en especial los de género y memoria. “Podemos lograr que las paredes hablen, cuenten, griten la necesidad de defender todos los Derechos Humanos, entre ellos los de género, los conseguidos y los por conseguir, especialmente en estos tiempos crueles, negacionistas y destructores”.
Sus intervenciones han generado diversas reacciones en la comunidad. Al preguntarles cómo perciben la respuesta del público a su arte, respondieron: “Quizá la respuesta está dada por los acontecimientos del pasado mes, la vandalización y la restauración de los murales de la Ciudad Universitaria. En esta comunidad dividida, están los que queremos una sociedad justa, igualitaria, libre, bella, entre los que estamos, y los profetas del odio que solo saben agredir y ensuciar, a quienes les decimos que no lo lograrán”.
Proyectos en marcha y futuras intervenciones
El colectivo tiene varias acciones planificadas para los próximos meses:
- 20 de marzo: Restauración del Mural de Madres y colocación de un pañuelo en el Pabellón Brujas de la Facultad de Artes.
- 24 de marzo: Participación en la marcha con el “Punto Mosaico”, una actividad donde los participantes podrán crear y llevarse su propio pañuelo como símbolo de memoria y resistencia.

- A lo largo del año, proyectan más intervenciones artísticas, respondiendo a las necesidades que surjan en la lucha contra la destrucción del país.
Con la incorporación de nuevas integrantes, Arde Mosaico busca seguir creciendo, renovando ideas y ampliando sus acciones. “La realidad nos marcará agenda creativa e interventora”.
Su mensaje es claro: “Los Derechos no se consiguen ni se cuidan solos. Y el arte es una de las muchas formas de hacerlo”.
En el marco del Mes de la Mujer, el trabajo de Arde Mosaico cobra una relevancia especial. Si a esto le sumamos que marzo también es el Mes de la Memoria por la Verdad y la Justicia, su visibilización resulta fundamental. A través del arte, el colectivo refuerza la importancia de recordar y reflexionar sobre estas luchas en el espacio público.