PEKÍN.- La tensión diplomática entre China y Estados Unidos volvió a picos altos luego de que la Administración de Donald Trump cerrara el consulado del gigante asiático en Houston bajo acusaciones de funcionar como un centro de espionaje. China volvió a rechazar ayer la acusación calificándola de difamatoria” y reiteró que tomará represalias que no especificó.
Esto es desmantelar el puente de la amistad entre ambos pueblos, el chino y el estadounidense”, declaró el portavoz de Exteriores chino, Wang Wenbin, quien subrayó que se trata también de una grave violación del Derecho Internacional y de los principios básicos de las relaciones internacionales”. Sin embargo, Washington acusó también al consulado de China en San Francisco de esconder a una científica de ese país con vínculos con el Ejército chino para evitar que sea detenida tras ser acusada de haber tramitado un visado falso.