El presidente Alberto Fernández anunció que habrá un bono de 15 mil pesos para las familias vulnerables que residan en las zonas donde rijan las nuevas restricciones, cuyo cumplimiento estará a cargo de las fuerzas federales, y también reconoció su malestar con la Ciudad y las disidencias internas en el Gobierno por la suspensión de las clases presenciales.
El mandatario mostró su enojo con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por cómo adaptó las anteriores restricciones: «Esta vez no lo hablé. Trato de hablar siempre. Las medidas anteriores las dialogué, las conversé. Quise cerrar los restaurantes, me pidieron que no lo hiciera. Consensué todas las medidas y después anunciaron que cerraban a las 23:00, pero que se podían quedar hasta las 00».
«Por eso esta medida no la consensué: la tomé yo y me hago cargo yo. Son las fuerzas federales las que van a hacer cumplir esto. Si la Policía de la Ciudad no lo quiere hacer, como vi que pasó el fin de semana en Palermo… No nos engañemos más, no nos mintamos: si el protocolo dice que tenemos que estar a dos metros de distancia, ¿alguno conoce una mesa de un bar de 2×2?», subrayó.
Al justificar las nuevas restricciones, el jefe de Estado afirmó que el incremento de casos «todo tiene que ver, sin ninguna duda, con el relajamiento social que se vive» y agregó: «Hace falta que de una vez por todas los argentinos entendamos el riesgo en el que estamos. Si no lo entendemos, todo es más difícil».
En diálogo con Radio 10, el Presidente destacó que la Administración Pública Nacional regresó hace algunas al teletrabajo: «Invité a todos a seguirme y me siguieron muy pocos, debo decir, francamente».
Además, se refirió a su evolución tras haber contraído coronavirus: «Ya estoy bastante repuesto. Fue un largo aislamiento. Protocolarmente debo cumplir, no tanto por lo que yo sentía, porque no tuve dolencias o síntomas graves, sino por el riesgo de contagiar a otros. Eso me obligó a estar aislado».
El mandatario también se refirió al impacto que tendrán las nuevas restricciones en los sectores más vulnerables y anunció que la ANSES otorgará un bono de 15 mil pesos.
«Ayer (miércoles) quise llamar la atención sobre el problema sanitario y no mezclarlo con otros aspectos. No tomamos estas medidas y dejamos a la gente a la intemperie: sabemos que muchos la están pasando mal y que estos problemas les hacen más difícil la vida. Vamos a asignarle a cada titular de la AUH, por Embarazo y asignaciones familiares a monotributistas 15 mil pesos por estos 15 días que tienen que enfrentar en estas situaciones de mayores restricciones», indicó Alberto Fernández, quien anticipó que la titular de la ANSES, Fernanda Raverta, dará más detalles.
Sin embargo, aclaró: «Esto lo cobran en los lugares donde rijan estas restricciones».
A la vez, cuestionó a la alianza opositora Juntos por el Cambio por «poner en duda la honestidad con la que se ha trabajado con las vacunas y dicen que se debe investigar cómo se compraron y se concentraron en el Gobierno nacional».
«Es falso. Hubo una ley que autorizó al Gobierno nacional a comprar vacunas y también autorizó a todos los gobernadores de la Argentina. Sé que muchos no hicieron nada por conseguir vacunas y otros lo intentaron sin suerte, porque la venta de vacunas está muy concentrada y los laboratorios deciden negociar directamente con los estados nacionales», señaló el Presidente.
Y añadió: «Mi compromiso es con la sociedad, con cada argentino y cada argentina, aunque eso me lleve a tomar medidas muy antipáticas después de un año de pandemia. Después, que digan o escriban lo que les plazca».
Asimismo, el mandatario reconoció que hubo disidencias dentro del Gobierno en lo que respecta a la suspensión de la presencialidad en las clases. «Tuve discusiones dentro de mi mismo equipo porque el ministro de Educación creía que había que insistir un poco más en las clases presenciales. Pero las clases presenciales no son sólo las clases, sino ver cómo las madres se agolpan frente a la puerta, cómo el contagio puede hacer más fácil, ver cómo los chicos juegan a cambiarse los barbijos. Escucho a todos», indicó.
Por último, el jefe de Estado aclaró que los shoppings van a permanecer cerrados y no tendrán siquiera horario reducido para su funcionamiento.