Con el paso de los años, el riesgo de caídas, dolores musculares y contracturas aumentan. Para los adultos mayores la prevención más efectiva es mantenerse activos tanto física como mentalmente. Un estudio realizado desde el Departamento de Deporte, Ejercicio y Rehabilitación de la Universidad de Northumbria, Inglaterra, comprobó que los mayores de 60 años que incorporaron una rutina de yoga en sus días han recuperado notablemente la calidad de vida, inclusive personas con afecciones previas que incluían artritis o trastornos psíquicos.
El yoga aporta flexibilidad, fuerza, equilibrio, además ayuda a la concentración, a tener mayor capacidad respiratoria y alcanzar una relajación para disminuir las tensiones, el estrés y la ansiedad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los adultos mayores realicen al menos 150 minutos de actividad física semanal. Practicar yoga es una forma efectiva para que comiencen a realizar ejercicios y a mejorar su bienestar mental y social.
El yoga es una práctica milenaria que combina cuerpo y mente. Se trata de la combinación de posturas físicas, ejercicios de respiración y meditaciones guiadas.
Los programas de ejercicios para adultos mayores deben estar bien diseñados y contar con un seguimiento por parte del instructor, que debe considerar las limitaciones y afecciones de quien lo practica. Se han desarrollado adaptaciones a posturas de yoga más desafiantes para que las personas con limitaciones físicas puedan participar de manera segura y cosechar beneficios para su salud.
El estudio demostró que, con una rutina de al menos una vez a la semana, las personas mejoraron:
• Movilidad
• Capacidad para caminar
• Flexibilidad
• Estado de ánimo
• Dolencias corporales
• Redujeron el nivel de estrés
• Sintieron menos ansiedad y/o angustia
Más del 70% de los participantes dijeron que les gustaba la interacción social que brindaba la clase de ejercicios grupales y que habían encontrado un espacio para conocer y hacer amistades con pares.
El yoga es una terapia holística que tiene el potencial de producir una variedad de beneficios físicos y mentales.
Distintos tipos de yoga
Para los interesados en iniciar yoga y tengan una movilidad limitada, puede ser un poco abrumador saber cómo comenzar. Lo necesario es tener voluntad y decisión para dar el primer paso y consultarlo con el médico de cabecera.
Existen opciones de yoga muy suave para principiantes: desde movimientos de estiramiento hasta ejercicios de respiración diseñados para calmar y energizar, independientemente de la edad.
Según el nivel de movilidad y flexibilidad, hay algunos tipos de yoga que pueden ser más desafiantes que otros
• Hatha yoga. Es considerado el yoga clásico original. Usualmente recomendado para principiantes de yoga o personas que han perdido el tono muscular y la flexibilidad.
• El yoga acuático o Aqua yoga. Un tipo de yoga suave y de bajo impacto que se practica en piscina. En el agua, el cuerpo soporta menos peso y eso permite realizar movimientos sin ejercer demasiada presión sobre huesos y músculos.
• El yoga de ritmo lento (o yin yon). Para quienes se animan a mantener movimientos o poses durante períodos de tiempo más largos.
• Kripalu yoga. Muy recomendado para adultos mayores y principiantes de yoga. Son prácticas que se centra en la curación física, en la meditación y el autodescubrimiento.
• Yoga en silla. Una forma suave de yoga que se practica sentados en sillas. Suele también indicarse en adultos mayores que sienten la necesidad de hacer ejercicio y mejorar su movilidad.