Mariano Herrón, ayudante de campo de Miguel Ángel Russo, contó el motivo que dio inicio al escandaloso enfrentamiento de la delegación de Boca contra la policía brasileña, el personal de seguridad del estadio y algunos miembros de Atlético Mineiro en Belo Horizonte tras haber quedado polémicamente eliminados de la Copa Libertadores.
«Fue un papelón lo que pasó ayer (por el martes) en Brasil. Siempre cuando vas allá la pasas mal pero como ayer nunca me había pasado. Nosotros reaccionamos después de la cargada del presidente de Atlético», aseguró Herrón en diálogo con La Voz del Estadio.
Tras el enfrentamiento, la delegación de Boca tuvo que ir a declarar a la comisaría y fue liberado después de más de 11 horas. Finalmente, durante la tarde del miércoles el plantel pudo regresar a Buenos Aires y, tras realizarse los PCR correspondientes, se trasladó al hotel Intercontinental por el pedido del Ministerio de Salud, que tomó la decisión de aislar por siete días a todos los que viajaron a Brasil. Sin embargo, el Xeneize presentó notas del consulado y Conmebol para evitarlo.
El comunicado de Boca tras la polémica
«El Club Atlético Boca Juniors, institución de 116 años de historia, sufrió en esta serie de Copa Libertadores ante Atlético Mineiro dos fallos inexplicables anulando goles lícitos que destruyeron el espíritu deportivo del torneo más prestigioso del continente. Hoy nuestros socios, hinchas, jugadores y cuerpo técnico han sido perjudicados de forma alevosa, interpretando de manera maliciosa e intencionada la tecnología VAR. Lo acontecido marca un hecho sin precedentes, por ser el único caso en donde ganando los dos partidos de la serie un club queda eliminado de la competencia. Situaciones como las vividas en las últimas jornadas dejan en manifiesto el manejo tendencioso de nuestro fútbol continental. Tampoco podemos dejar pasar el hecho que desde la máxima autoridad del Club Atlético Mineiro se fogoneó con expresiones violentas y amenazantes durante varios días hasta llegar a los lamentables hechos en los que fueron damnificados físicamente nuestros jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, quienes tuvieron que estar demorados por más de 12 horas en situaciones lamentables con el fin de no romper la burbuja sanitaria. Una vez más hemos sido perjudicados por decisiones que poco tienen que ver con lo deportivo y mucho con el manejo arbitrario de una competición que no lo merece».