El presidente Alberto Fernández calificó de tóxico” al préstamo otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) a la Argentina durante el gobierno de Mauricio Macri y sostuvo que esa administración cometió un deudicidio” en el país. Al hablar de manera virtual ante la 76ª Asamblea General Ordinaria de la ONU, Fernández sostuvo que los recursos aprobados por el FMI a la Argentina en esta deuda insostenible fueron de 57.000 millones de dólares, el equivalente a todo lo que el organismo desembolsó en los años de la pandemia con destino a 85 países del mundo”.
Gran parte de esos recursos han sido fugados del país por una apertura irresponsable de la cuenta de capital”, dijo, y consideró que resulta clave rescatar los principios de sostenibilidad de la deuda que se han debatido y acordado en la ONU en aquella resolución 69/319 de 2015”.
Para Fernández, la falta de un marco multilateral para la reestructuración de la deuda de los países de renta media sigue siendo un vacío importante dentro de la gobernanza financiera internacional”, por lo que reclamó una reconfiguración de la arquitectura financiera global” porque está latente el riesgo de una debacle generalizada de deudas externas en los países en desarrollo”. En ese sentido denunció que América Latina y el Caribe destinan un 57% de sus exportaciones al pago de servicios de la deuda externa”.
Luego manifestó que la crisis originada por la Covid-19 es también una crisis de derechos humanos” por lo que reiteró la importancia de que las vacunas deben ser bienes públicos globales”.
El mandatario formuló además un pedido a la comunidad internacional para avanzar en la investigación del atentado a la sede de la Asociación Mutual Israelita, ocurrido hace 27 años. Y reiteró el reclamo argentino sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes que integran parte del territorio nacional argentino.