La Municipalidad de Córdoba anunció ayer la decisión de quitarle 198 servicios del transporte urbano de pasajeros a la empresa Ersa, que corresponden a 13 líneas que forman parte del corredor 3 y 8. Esta medida, que comenzará a regir dentro de un mes, se adoptó días después que se conociera que casi 90 colectivos de dicha concesionaria se encontraban circulando por la ciudad con el trámite vencido de la Inspección Técnica Vehicular.
Cabe remarcar la ITV que no es solo una instancia recaudatoria por parte del Estado municipal. Se trata de un requisito que implica la revisión técnica de los vehículos para determinar si están en condiciones de circular, y que apunta a la seguridad vial: que los ómnibus no presenten fallas que comprometan la integridad física de quienes comparten el espacio público.
Para instrumentar los cambios dados a conocer en la víspera, se conformará una mesa con la Unión Tranviarios Automotor (UTA) para el traspaso del personal de Ersa. La firma municipal Tamse tomará el corredor 8. Para ello, se comprarán 50 nuevas unidades para prestar el servicio. Se invertirán 800 millones de pesos, y la operación se materializará esta semana. El 3 quedaría para Coniferal. O al menos, eso espera la administración de Martín Llaryora.
De acuerdo a lo señalado en un comunicado, la medida busca equilibrar el sistema ya que hasta la fecha, Ersa tenía a su cargo más del 75% del sistema siendo esto un oligopolio en el transporte, reduciéndolo a partir de esta determinación a menos del 50%.
La medida, que se complementa con la multa aplicada en los últimos días a la misma concesionaria, debido a los hechos que son de público conocimiento, busca redistribuir y equilibrar el servicio del sistema de transporte urbano. Asimismo, el municipio anticipó que llevará adelante una inversión superior a los 800 millones de pesos, con la compra de 50 nuevos colectivos, que se sumarán a las 30 nuevas unidades ya adquiridas hace un mes.