El presidente francés, Emmanuel Macron, cambió el histórico color azul de la bandera de Francia usada en sus intervenciones para retomar el utilizado antes de 1976, confirmó este lunes el Elíseo, sobre esta sutil modificación llevada a cabo hace tres años.
El uso de nuevo del azul marino fue una propuesta de un consejero del mandatario liberal y comenzó primero en sus discursos a partir de finales de 2018.
Macron «escogió para las banderas tricolor que adornan el Elíseo el azul marino que evoca el imaginario» de los héroes que lucharon durante la Revolución Francesa, así como tanto en la Primera como en la Segunda Guerra Mundial, indicó la presidencia.
Este cambio pone fin a 45 años de utilización de un azul más claro, adoptado en 1976 por el entonces presidente Valéry Giscard d’Estaing para que coincidiera con el de la bandera europea y que seguirían utilizando sus sucesores hasta 2018.
Detrás de esta iniciativa se encuentra el director de operaciones del Elíseo, Arnaud Jolens, como reconoció en el libro «Elysée Confidentiel» (Elíseo confidencial) de Eliot Blondet y Paul Larrouturou, publicado el 15 de septiembre de 2021.
En 2018, el actual mandatario ya añadió al logo de la presidencia la cruz de Lorena, utilizada por la Francia Libre del general Charles de Gaulle durante su lucha contra la ocupación de la Alemania nazi.
«Había cambiado el azul de la bandera por razones estéticas durante el acercamiento a Europa. La bandera que todos los presidentes llevaban desde entonces no era la verdadera bandera francesa», señaló Arnaud Jolens, director de Operaciones del Elíseo y promotor del retorno al color original.
Desde el entorno presidencial alegan que el azul marino es más elegante y juran que no se trata de tomar distancia de la UE a pocas semanas de que Francia toma la presidencia del bloque.
En tanto, el Palacio del Elíseo evitó en su momento mencionar el cambia, tal vez porque tocar los símbolos de la república es siempre una cuestión delicada.