La dignidad es un estado del ser. El diccionario la define como la “cualidad propia de la condición humana de la que emanan los derechos fundamentales, junto al libre desarrollo de la personalidad, que precisamente por ese fundamento son inviolables e inalienables”. Con los años, y principalmente después de la segunda guerra mundial, cuando se sancionan los Derechos Humanos en 1948, la humanidad ha dado pasos importantes en torno a los valores y a los derechos de las personas. De esta manera, buscamos tener dignidad en los 3 momentos trascendentales de la vida: el nacimiento, el transcurrir y la muerte. Hoy hablaremos de este último momento: la muerte.
María Fernanda Marchetti, junto con la Licenciada en Psicología Mariana Morosi y la Doctora Neby Rosi, forman parte del área de Bioética del Ministerio de Salud de la Provincia de Córdoba. Fernanda coordina dicha área. En diálogo con El Club de la Porota nos contó sobre las distintas funciones que tienen dentro de este sector específico de la institución, como así también sobre el Registro Único de Voluntades Anticipadas de la provincia de Córdoba. “Dentro de las tareas del área está la de coordinar la red de comités hospitalarios de bioética de toda la provincia, que incluye comités en la parte pública, en la parte privada, en el interior y en la capital, y del Registro Único de Voluntades Anticipadas. Estamos trabajando con distintas agrupaciones e instituciones para difundir esto que pretende garantizar el derecho de toda persona que así lo desee, de dejar por escrito qué decisiones tiene tomadas en relación a su salud para cuando no las pueda expresar. Entonces les invitamos a que nos sigan en redes, a que accedan a la información disponible en la página y nos visiten en la oficina del registro que se encuentra en la nueva maternidad provisional” (@areadebioetica en Instagram)
Basta con googlear las palabras claves y el nombre del Doctor Carlos “Pecas” Soriano va a aparecer en los primeros resultados de la búsqueda. Soriano es médico especialista en Emergentología del Hospital de Urgencias de Córdoba, ex docente de la Universidad Nacional de Córdoba y Magister en bioética. Escritor y poeta, ha publicado numerosos artículos y libros, editados en Argentina y en el exterior. Lo contactamos para dialogar, sacarnos dudas y aprender sobre el tema y tuvo la gentileza de prestarnos algo de su valioso tiempo.
“Vivimos en una cultura en la que no hablamos de la muerte, mucho menos de la muerte digna”, precisa Soriano como para dar un pantallazo general del tema. “Hemos sido entrenados, nuestra cabeza está formateada y nuestro corazón también para salvar vidas. Entonces, es difícil cambiar la palabrita de ‘dejar’ morir por ‘permitir’ morir, por permitir que la naturaleza actúe. Hay ciertos momentos de sufrimientos irreversibles, cuando ya no hay más nada que tratar, pero sí hay cosas por hacer, como consolar, aliviar, estar al lado, apapachar al paciente, pero no hay más nada que tratar porque ya no tiene cura esa enfermedad o porque ya es terminal. No sabemos muy bien cuándo detenernos y confundimos ese ‘no hay más nada que hacer’ con el ‘no hay más nada que tratar’”, puntualiza “Pecas” al hablar de los profesionales de la salud.
En nuestro país existen leyes que tratan sobre este tema. En 2012 se sancionó la Ley de Muerte Digna (Ley 26.742), que en su primer artículo dice lo siguiente: “el paciente que presente una enfermedad irreversible, incurable o se encuentre en estadio terminal, o haya sufrido lesiones que lo coloquen en igual situación, informado en forma fehaciente, tiene el derecho a manifestar su voluntad en cuanto al rechazo de procedimientos quirúrgicos, de reanimación artificial o al retiro de medidas de soporte vital cuando sean extraordinarias o desproporcionadas en relación con la perspectiva de mejoría, o produzcan un sufrimiento desmesurado. También podrá rechazar procedimientos de hidratación o alimentación cuando los mismos produzcan como único efecto la prolongación en el tiempo de ese estadio terminal irreversible o incurable”.
¿Se cumple esta ley? ¿La población conoce esta ley? ¿Y los profesionales de la salud? “Esta ley está refrendada por un artículo del Código Civil. Por lo tanto, es muy poderosa. Sin embargo, en estudios que hemos hecho y que están publicados, la mayoría de la gente en salud la desconoce y ni qué hablar de los familiares. Por lo tanto, si uno desconoce una ley y se acerca, por ejemplo, a un jefe de terapia intensiva, le dice, mire, la familia ha decidido que al paciente tal, que está en coma y que está intubado por todos lados, ha decidido retirarle todo tipo de terapia. Y la respuesta más común que recibo es ‘pero usted está queriendo hacer eutanasia, doctor’. No, no. Con todo respeto, mire, doctor, la eutanasia es la finalización intencional de la vida de un paciente por parte del médico a pedido reiterado del paciente cuando éste sufriera una enfermedad irreversible de grave sufrimiento físico o psíquico, de sufrimiento insoportable. Son dos cosas distintas. Pero, de vuelta, tiene que ver con el desconocimiento”.
La pregunta que se impone ante la situación actual es: ¿podemos ser optimistas a futuro? La respuesta de “Pecas” es contundente: “sí, por supuesto. El Estado es el responsable de garantizar las libertades individuales y qué mayor libertad de la que poder vivir dignamente y como parte final de esa vida morir dignamente. Los cambios morales y culturales en la sociedad llevan tiempo, son lentos, pero a medida que podamos hablar sobre estos temas vamos a avanzar y llegar a buen puerto”.
Gracias al Dr. Carlos Soriano y a las referentes del área de Bioética de la Provincia: Dra. María Fernanda Marchetti, Licenciada en Psicología Mariana Morosi y Dra. Neby Rosi por habernos prestado su voz y así echar luz en la temática de muerte digna y en la divulgación del registro de voluntades anticipadas que impulsa el Ministerio de Salud del Gobierno de Córdoba.
Porota.
Libro: Morir con dignidad
Carlos Pecas Soriano es el autor del libro “Morir con dignidad en Argentina. Utopía o realidad”. La obra es un alegato para la liberación de conciencias. Soriano advierte con claridad que la ley no lo resuelve todo, y que el primer derecho a asegurar es el derecho a conocer los derechos. Desde ese lugar se denuncia el desconocimiento sobre el marco legal vigente que promueve muertes dignas, y desaprueba cualquier intento indigno de prolongación de agonías, de la desmesura de intentar curar lo incurable. El autor se propone fortalecer los conocimientos tanto de los profesionales de la salud como de todas las personas, a fin de lograr una mayor autonomía para “reflexionar críticamente sobre decisiones cruciales en los confines de la vida”. Considera que el marco legal existente sólo constituye una protección necesaria aunque insuficiente, con el agravante de que la mayoría del personal de salud, pacientes y familiares desconocen las normas legales. “Morir con dignidad en Argentina. Utopía o realidad”. Alaya Ediciones.
Directiva de Voluntad Anticipada
Mañana en Villa Allende
Mañana sábado 2 de noviembre Sol Rodríguez Maiztegui y El Club de la Porota participarán de una importante actividad que impulsa la Municipalidad de Villa Allende para despedir el mes de las personas mayores. A las 9h. en el SUM del Polideportivo “Atilio Minoldo” (Av. Roque Saenz Peña 300) ¡vamos a Hackear el Viejismo! Sumate. La propuesta es abierta para todo público y por supuesto gratuita. No te olvides de llevar tu mate y algo rico para compartir. Organiza: Municipio de Villa Allende.
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