En una final vibrante y de tono épico, La Natividad–La Dolfina se consagró en el 85° Abierto de Tortugas tras superar por un ajustado 12-11 a Ellerstina–Indios Chapaleufú. En una definición que había sido postergada por las lluvias en Buenos Aires, el equipo de Cañuelas selló el segundo capítulo de la Triple Corona y quedó a un paso de la gloria máxima: el Abierto Argentino de Palermo.
El duelo tuvo el condimento histórico que propone esta rivalidad familiar y deportiva. El inicio fue cerrado, pero Bartolomé Castagnola rompió el hielo con una definición de alta jerarquía, asistido por su hermano “Jeta” Castagnola. Pese al doble aporte goleador de “Poroto” Cambiaso en el segundo chukker, Ellerstina reaccionó con la experiencia de los hermanos Pieres. El talento de Facundo Pieres se hizo sentir para adelantar a los de General Rodríguez por 5-4.
El marcador llegó a un electrizante 8-8 en el séptimo periodo, hasta que Camilo Castagnola marcó la diferencia con una definición cruzada luego de un penal fallido, estirando la ventaja a 11-9. Ellerstina presionó hasta el cierre y llegó a ponerse a tiro, pero un foul ofensivo de Facundo Pieres en los segundos finales terminó de sellar el triunfo por 12-11 para la fusión de Cañuelas.
Con este título, Adolfo Cambiaso (h.) alcanzó su décima consagración en Tortugas, mientras que su hijo “Poroto” celebró su primer título en este certamen.
La Dolfina vuelve a soñar en grande y buscará en Palermo completar la Triple Corona, caminó que inició al ganar la edición 132 del Abierto de Hurlingham, luego de vencer a UAE Polo.
De triunfar en Palermo, igualaría el récord histórico de Coronel Suárez, conquistando la Triple Corona por cuarta vez.
