El frente de conflicto que abrió el gobierno nacional con las empresas petroleras y gasíferas por la quita de subsidios en Vaca Muerta sumó ayer un nuevo actor. La empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) se quejó por la decisión comunicada por el secretario de Energía de la Nación, Gustavo Lopetegui, y estimó que generará pérdidas por aproximadamente 60 millones de dólares. Además, como supo hacer el Grupo Techint, principal perjudicado por el recorte de las compensaciones, advirtió que revisará sus inversiones en la zona.
Según un comunicado enviado por YPF a la Comisión Nacional de Valores (CNV), el alcance y las condiciones del programa nacional “difieren de lo previsto originalmente y afectan de manera perjudicial tanto los proyectos que se encontraban a la espera de recibir la aprobación formal de la Secretaría como así también el monto a percibir vinculado con proyectos aprobados a la fecha”.
En este sentido, YPF puntualizó que evaluará “la continuidad de las inversiones en aquellos proyectos de desarrollo de gas no convencional que no contarán con el beneficio del programa”. Para la empresa estatal, el Gobierno modificó “algunas premisas básicas que sustentaron la decisión de inversión oportunamente tomada” y advirtió que “analizará cualquier otra medida que se derive de los cambios recién comunicados”.
De este modo, le abrió también una puerta a la vía judicial, como también anunció Techint. En esa línea, días atrás, la empresa Tecpetrol (del grupo Techint) alertó que iba a perder unos 148 millones de dólares por la disposición oficial y deslizó que podría iniciar acciones legales.









