En un contexto de recesión y desafíos económicos, la industria cordobesa enfrenta un panorama complejo y fragmentado en 2024. La caída en la demanda interna, el aumento de costos en materias primas, energía y salarios, y una reducción en la inversión han impactado significativamente en la capacidad productiva y la rentabilidad de las empresas de la región. Asi lo reflejan los resultados del relevamiento realizado en el mes de julio por la Unión Industrial de Córdoba (UIC) en conjunto con la consultora Perspectivas Sociales.
Panorama General: crisis y ajustes
La industria cordobesa se encuentra en medio de una tormenta económica. Un 31% de las empresas reportó una caída en su producción durante julio de 2024, mientras que un 71% de ellas vio una reducción en su rentabilidad en comparación con el año anterior. Las dificultades no se limitan solo a la producción; un 48% de las industrias ha reducido sus inversiones anuales, reflejando una cautela generalizada ante el escenario de incertidumbre.
Los costos en aumento han llevado a muchas empresas a implementar medidas de ajuste. Un 20% de las compañías ha reducido los turnos laborales y el mismo porcentaje ha disminuido su personal. A pesar de esto, la mayoría de las empresas han logrado mantener una estabilidad en el empleo, lo que sugiere una resistencia considerable frente a las adversidades del entorno.
Impacto en las microempresas y pequeñas empresas
El segmento de las microempresas es uno de los más afectados. Un 34% de estas empresas ha registrado una disminución en su volumen de producción, mientras que un 45% ha visto caer la demanda local. Además, las dificultades en el acceso a financiamiento y el incremento de los costos de operación han llevado a un 19% de las microempresas a tener problemas para cubrir sus tarifas públicas, y un 33% apenas ha podido cumplir con sus obligaciones tributarias parcialmente. A pesar de estos desafíos, más del 60% de las microempresas mantiene expectativas positivas para el futuro, esperando una recuperación en 2025.
Las pequeñas empresas también presentan un escenario mixto. Aunque un 30% de ellas ha experimentado un crecimiento en la demanda local y un 9% ha incrementado su personal, un segmento significativo ha visto reducida su inversión y enfrenta dificultades similares a las de las microempresas. No obstante, el 65% considera que es un buen momento para invertir en innovación, mostrando una disposición a adaptarse y crecer a pesar del contexto adverso.
Medianas y grandes empresas: diversificación en los resultados
Las empresas medianas muestran resultados divididos. Un 38% de las medianas T1 y T2 han experimentado una caída en su nivel de stock y un 30% ha realizado pagos parciales a proveedores debido a la falta de financiamiento. A pesar de estos retrocesos, las expectativas para 2025 son optimistas: más del 70% de las medianas T2 anticipa mejoras en su rentabilidad, inversiones y capacidad instalada.
Las grandes empresas, por su parte, comienzan a mostrar signos de recuperación. Aunque persisten las dificultades en las exportaciones y el aumento de costos de insumos, la mitad de las grandes empresas ha mantenido o incrementado su producción. Además, estas compañías mantienen un interés robusto en nuevas inversiones, confiando en que es un momento adecuado para invertir en maquinaria, capital de trabajo, y la innovación de productos y procesos.
Mirando hacia el futuro: optimismo moderado
A pesar del panorama desafiante en 2024, la mayoría de las empresas cordobesas muestra un optimismo cauteloso de cara a 2025. Un 71% de las industrias anticipa una recuperación en la rentabilidad, mientras que un 67% proyecta una mejora en las inversiones. La visión hacia el futuro es clara: aprovechar el momento para innovar, mejorar procesos y prepararse para una recuperación que, aunque lenta, se vislumbra en el horizonte.
Este optimismo está basado en la expectativa de un entorno económico más favorable, una recuperación de la demanda interna y una estabilización de los costos. La capacidad de adaptarse y la resiliencia demostrada por la industria cordobesa durante este año recesivo serán fundamentales para superar los desafíos y aprovechar las oportunidades de crecimiento que el 2025 podría ofrecer.