El Gobierno nacional anunció ayer el lanzamiento del Régimen de Reparación Federal para ordenar las “deudas mutuas” y “compensaciones” económicas entre la Nación y las provincias, que incluyen posibles cesiones de inmuebles y terrenos como principales herramientas para cerrar los saldos deudores.
El nuevo régimen será publicado hoy en el Boletín Oficial y establece que las provincias y la Ciudad de Buenos Aires tendrán 30 días hábiles administrativos para acogerse de manera voluntaria a la propuesta y 60 días hábiles administrativos para presentar la documentación respaldatoria. “Buscamos caminar junto con los gobernadores hacia un verdadero federalismo”, expresó el vicejefe de Gabinete, Lisandro Catalán, al anunciar la iniciativa.
El funcionario expresó que “la idea es hacer un borrón y cuenta nueva en las compensaciones entre las provincias y la Nación”, ya que “desde hace muchas décadas las cuentas fiscales y un centralismo creciente han llevado a que las relaciones financieras y económicas entre la Nación y las provincias no sean simétricas”. El objetivo es que “tengamos claras las compensaciones entre la Nación y las provincias, y las provincias también puedan conducir su propio destino”, declaró.
A través de este decreto, los distritos podrán incorporar al citado régimen las deudas que consideren necesarias, con el objetivo de unificarlas con aquellas que el Estado nacional mantiene con ellos. Así se buscará acordar “compensaciones, conciliaciones, transacciones, reconocimiento, remisiones y toda otra operación que tenga como fin la cancelación de deudas, con créditos que tengan cada una de las jurisdicciones con el Estado nacional”, informó el Ministerio del Interior.
“Hay empresas del Estado nacional que están radicadas en provincias. Puede haber transferencia de empresas, de terrenos. No estamos cerrados a ninguna herramienta que puedan proponer, por su parte, las provincias”, detalló Catalán, que resaltó que “invitamos a todos los gobernadores a mirar hacia el futuro y trabajar juntos, con el firme objetivo de encontrar soluciones que le den un orden a las provincias y a la Nación”, pues el objetivo “es ir hacia un verdadero federalismo, la Nación no debe ser un corset que impida el crecimiento de las provincias”.
El decreto que se conocerá hoy indica que los saldos provenientes de débitos o créditos recíprocos serán cancelados en las condiciones que establezca el acuerdo celebrado entre Nación y cada uno de los distritos participantes. Y deja como opción la posibilidad de que si el saldo de deuda resulta a favor del Estado nacional, las provincias puedan cancelarlo afectando un porcentaje de los recursos que le correspondan por coparticipación.